Así lo advirtió en la 99.9 la presidenta de la Asociación Vecinal de dicho barrio y agregó que “la policía nos ha respondido que los patrulleros se habían caído en pozos que hay en la zona tratando de dar respuesta a un llamado”. Ante la situación, los vecinos han creado un grupo de Whatsapp para advertir sobre situaciones sospechosas.
La situación de algunos barrios en el sur de la ciudad es preocupante desde distintos aspectos. En Playa Serena, los vecinos se han quejado ayer al borde de la ruta por la inseguridad reinante en la zona y porque el mal estado de las calles no permite que los patrulleros puedan llegar a algunos sectores.
María Inés Benítez, presidenta de la Asociación Vecinal de dicho barrio, dio precisiones en la 99.9: “se incrementaron los hechos delictivos en las últimas semanas con robos calificados más graves y los vecinos se empezaron a movilizar. Ayer hicimos un corte parcial en la ruta reclamando por mayor seguridad”.
Más de allá de los robos que cada vez son más intensos, tampoco pueden obtener la respuesta policial requerida en tiempo y forma: “en los llamados que hicimos, nos respondieron que los móviles no pudieron llegar porque los patrulleros se habían caído en los pozos que hay en las calles de la zona. Esto genera mucho enojo en el vecino que no tiene mayores recursos económicos y lo que le roban es lo poco que tiene”, advirtió. También dejó en claro que muchos de los que perpetran los ilícitos son vecinos: “los delincuentes son de la zona, no están muy lejos de donde realizan los hechos”.
Ante esta situación, un grupo de Whatsapp que empezó con otro fin, se transformó en la manera que encontraron los vecinos para alertarse entre sí cuando advierten alguna actividad sospechosa: “en la mayoría de los casos son positivos porque los pudieron atrapar antes de realizar un robo o bien han llegado tarde. Es la manera de comunicarnos entre los vecinos y hay gente del Barrio Alfar, Punta Mogotes y demás. Hemos creado así un sistema de prevención ante la situación de los vecinos”, dijo Benítez.
Entre la falta de respuesta policial y las dificultades que encuentran para que los vecinos que son robados denuncien, se genera un combo difícil de sobrellevar: “hay zonas donde la policía no puede ingresar. El vecino no puede salir de su casa por la situación de las calles y tampoco la policía puede llegar. Se hace la detención gracias a la decisión del vecino, debemos convencerlo de resguardarlo para canalizar la denuncia de la mejor manera. El vecino tiene miedo de denunciar porque sabe que el ladrón volverá a salir”.
En medio de los reclamos, también advirtió que la justicia debe actuar de otra manera, porque sino los delitos no cesarán: “el Poder Judicial tiene que pensar en una reforma para la manera en que tratan a los delincuentes. Se han liberado a personas con tentativa de homicidio, daños a adultos que luego fallecen por la depresión que le genera el hecho, son cosas muy desagradables”, finalizó.