La vicepresidenta del Consejo de la Magistratura presentó un proyecto para crear una Oficina de Igualdad de Género en el organismo y explicó que no se trata sólo de una cuestión numérica, sino de concepciones sociales.
Las cuestiones de género están presentes en todos los estratos sociales y en los diferentes organismos. En el Consejo de la Magistratura, la vicepresidenta del organismo Marina Sánchez Herrero, propone la creación de una Oficina de Igualdad de Género y explicó en la 99.9 los alcances que tendría.
“El tema de género no es un problema de cantidad de mujeres, aunque hay una estadística que indica que, hasta ciertos niveles hay hasta mayoría de mujeres, pero llegando a cargos más importantes empieza a disminuir. Incluso yo soy la primera mujer en un cargo de este tipo después de 20 años y competí con 5 hombres. El problema es más profundo”, ejemplificó.
También dejó en claro que pretenden avanzar con el consenso en distintos aspectos que consideran necesarios: “el proyecto ha caído bien y no habría voces que se levanten contra esto. Lo que pretendemos es generar un equilibrio y no imponer. Buscamos realizar informes al plenario sobre la situación de la mujer dentro del Consejo y algo muy importante como la distribución equitativa de los cargos discrecionales que en su mayoría son hombres”.
También consideró que en la actualidad hay distintos sectores donde las mujeres son mayoría y sin embargo, el criterio no se apega a una cuestión de género: “no sirve de nada poner 70 u 80 por ciento de mujeres en la justicia si no cambiamos culturalmente la cuestión de género. En los Juzgados de Familia, por ejemplo, hay más mujeres que hombres y falta la mirada de género”.
Otro de los puntos que destacó para ejemplificar las situaciones hacia las que apuntan fue que “nosotras como mujeres no tenemos ninguna licencia. A mí se me enferma un hijo y tengo que ir con mi hijo con fiebre. Es un ejemplo, pero esa es una mirada de género”.