Alicia, la hermana de Laura Iglesias, la trabajadora del Patronato de Liberados que fue asesinada, contó en la 99.9 que en una conversación dos días antes del crimen la víctima le había confesado que estaba preocupada por algo. Además, indicó que desde la familia piensan que participó más de una persona en el crimen y detalló algunas falencias en la investigación.
(Foto: Fabián Garciarena)
El crimen de la trabajadora del Trabajadora del Patronato de Liberados, Laura Iglesias, ha generado muchas dudas en la familia de la víctima. Las sospechas tienen que ver con algunas cuestiones puntuales que aún no fueron investigadas y se refieren a la participación de más personas en el hecho, además de Esteban Cuello, el único detenido.
Esta mañana en la 99.9 habló Alicia, la hermana de Laura. Explicó que “la familia, la gente que quiere a Laura, estamos siguiendo los pasos de la fiscalía y pusimos un abogado porque necesitamos que se sepa toda la verdad y que haya justicia”.
En relación a esas dudas, aclaró: “pensamos que no puede haber sido una sola persona quien hizo esta atrocidad. Ahora tenemos un detenido y no podemos entender que este detenido haya tenido algún móvil para asesinarla”. Sin dejar de lado la participación de Cuello, indicó que hubo más participantes en el crimen: “las pruebas son muy claras, él tuvo que estar, pero lo que no creemos es que la haya matado para tapar la violación. No tiene sentido viviendo a 200 metros. En realidad, pensamos que nunca antes había asesinado y la escena que montaron los que lo hicieron, estaba muy armada”.
Los datos que plantea tienen mucha lógica y abarcan distintas aristas y datos alrededor de la muerte de Laura: “mi hermana estaba terriblemente golpeada. Este muchacho es de cuerpo menudo y de 20 años, pero mi hermana tiene mucha experiencia con este tipo de personas y lo podía persuadir para que no la matara. Necesitamos que se investigue si no tiene que ver con su trabajo. No podemos creer que sea algo azaroso. Creemos que hay otro u otros más involucrados en este asesinato”.
Sumando otros datos destacados, Alicia agregó que “Laura hizo comentarios de situaciones complicadas sin darme referencias. Ella estaba comprometida con ATE para pelear por mejores condiciones, sobre todo de seguridad”. Luego abundó: “en la semana que ocurrió la tragedia, tuve una conversación telefónica con mi hermana, con quien hablábamos seguido. Ella me dijo en ese momento que estaba preocupada por otra cosa, le pregunté si era por un tema de la hija pero me dijo que era otra cosa. Me respondió ‘ahora no puedo contarte, pero en otro momento te llamo y te cuento’. Eso fue lo último que hablé por teléfono con mi hermana”.
A pesar de haberlo hablado con el fiscal Rodolfo Moure, interviniente en la causa, no la han llamado para declarar: “esto se lo dije al fiscal y me dijo que le interesaría tomarme declaración, pero después no me convocó”. Hubo otras cuestiones que criticó dentro de la investigación: “hay cuestiones que nos llaman la atención. Cuando pasamos por la DDI para que mi sobrina firmara que iba a recibir el cuerpo, le contó que mi hermana había dejado en su casa la mochila con todos los datos del día, las visitas que había hecho y que podía haber material interesante. Sobre nuestra insistencia, pasaron a buscarla a la noche, pero no se llevaron la computadora donde podría haber mails importantes”, señaló Alicia.
La única explicación que encuentran es la participación de al menos una persona más y con un motivo personal: “pensamos que la otra persona que podría haber intervenido en esto podría tener móviles para matarla relacionados con su trabajo. Necesitamos que se investigue y se esclarezca porque si no, no podemos descansar de esta sensación”.
El último dato que agregó Alicia Iglesias fue el de una llamada que recibió desde el teléfono de su hermana después del crimen: “el miércoles siguiente de la muerte de mi hermana, estaba viajando y escucho mi celular. Antes de atender, me aparece el número y el nombre de mi hermana. Cuando vuelvo a hacer la llamada, me aparece el mensaje de que estaba apagado o fuera del área de cobertura. Hubo una demora como de dos horas cuando llamamos a la policía para que investigue. Si hubieran hecho un rastreo inmediato, tal vez se podía encontrar algo más”.