Un casting de la empresa Aeroméxico en el que rechazan morenos, reavivó la polémica por el racismo y el clasismo. Hoy en día, los más discriminados en el DF son los indígenas, los pobres, los gays y los ciudadanos de piel morena.
La capital mexicana registra altos niveles de intolerancia y discriminación. Los ciudadanos indígenas, homosexuales, pobres y de piel morena son los más afectados, según afirma la Encuesta de discriminación encargada por el Gobierno del DF publicada el pasado 13 de agosto.
Las marcas comerciales mexicanas presentan como ejemplo de lo bello, lo próspero y lo recomendable a otros modelos humanos. Y es muy raro que en las campañas publicitarias se pueda ver al 59% de mexicanos que representan a las clases bajas. México es un país con un 60% de población mestiza y un 30% indígena.
Este fenómeno es denominado “malinchismo”, término que expresa la tendencia de muchos mexicanos a preferir lo extranjero a lo nacional; de ahí la alusión a La Malinche, la indígena que fue amante y traductora del conquistador español Hernán Cortés. Últimamente, esta ideología está cambiando, ya que cada vez más gente denuncia a través de blogs, películas, documentales, o incluso en las redes sociales, hechos de discriminación o racismo.
El pasado 12 de agosto, Tamara de Anda, una bloguera mexicana, evidenció la discriminación de las campañas publicitarias en su cuenta de Twitter: “me llega un mail de un casting para publicidad de @AeroMexico_com. Especifican que no quieren a NADIE MORENO. Tsss. La misma tarde me llamaron de la castinera indignados por la difusión de mi mensaje. Poco después, me contactaron periodistas y se formó un escándalo, pero creo que ya era hora. Le ha tocado a Aeroméxico, pero lo de pedir gente blanca y con ‘look Condesa’; lo hacen todas las marcas comerciales desde siempre”.
Días más tarde, la empresa Aeroméxico y la agencia de publicidad Catatonia emitieron comunicados pidiendo disculpas por el texto de la convocatoria y desligándose de la responsabilidad. La empresa publicitaria dice que la culpa fue de la castinera Free Lance. Y para redimirse de toda culpa, difundió un video de YouTube haciendo hincapié en el respeto a las trabajadoras domésticas, a los pobres, a los gays y a los indígenas.
Si bien la presencia de rubios y blancos en la publicidad mexicana es algo común, esta es la primera vez que una gran marca comercial ha tenido que pedir disculpas por realizar un casting discriminatorio. “Quizás ahora harán sus convocatorias con más disimulo, pero no creo que nada cambie, los güeros (rubios) seguirán representando este país de morenos”, comenta la bloguera De Anda. De los 112 millones de habitantes de México, solo un 9% son blancos.