“Prioridades”: Dinamarca cerrará sus embajadas en la Argentina y Tanzania

El ministro de Relaciones Exteriores de ese país, Jeppe Kofod. anunció una reestructuración de su cartera; “Lamentamos el cierre”, dijeron desde la Cancillería argentina, sobre la salida que se hará efectiva dentro de un año.

El ministerio de Relaciones Exteriores de Dinamarca anunció hoy una “reestructuración” para “poder cumplir con las prioridades del gobierno”, que incluye el cierre de dos embajadas: las que tiene en la Argentina y en Tanzania.

La reorganización de la Cancillería danesa implica, según un comunicado de la cartera, un refuerzo de las misiones de Dinamarca en la UE, la OTAN, la ONU, el Ártico y África, y de sus “iniciativas de exportación”. “En total, se fortalecerán 16 misiones y nueve departamentos en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores en Copenhague”, dice el texto.

Con el mismo objetivo, “se están cerrando las embajadas en Argentina y Tanzania, junto con el Consulado General en Chongqing (China) y la misión comercial en Barcelona (España)”, agrega el texto.

La Embajada de Dinamarca en la Argentina, ubicada en un edificio sobre Leandro N. Alem, en el microcentro, también es concurrente ante Paraguay y Uruguay. El cierre se hará efectivo en agosto del año próximo, según un comunicado de la representación diplomática en las redes sociales.

“La responsabilidad y las actividades se transferirán gradualmente a otras representaciones danesas”, dice el texto. “Después del cierre de la Embajada en Buenos Aires, Dinamarca continuará trabajando por los intereses daneses en Argentina, incluso a través de una red de cónsules honorarios”, agrega, y anticipa que en las próximas semanas brindarán más detalles sobre cómo procederán una vez que se concrete la salida.

“Lamentamos el cierre”, dijeron a LA NACION desde la Cancillería argentina tras la difusión de la noticia. Por ahora, la embajada argentina en Copenhague, a cargo de Conrado Solari Yrigoyen desde 2016, seguirá abierta, agregaron.

La legación de Dinamarca en la Argentina ya había estado cerrada entre 2000 y 2007. Mientras tanto, las embajadas en Chile, Brasil, Colombia y México serán las cuatro que seguirán abiertas en la región, según el sitio oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Dinamarca.

“Esta reorganización es para ayudarnos a orientar los esfuerzos que hacemos, tanto en casa como en el mundo, para que podamos hacer la mayor diferencia posible”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores danés, Jeppe Kofod, sobre las decisiones difundidas hoy.

“Mi primera prioridad como Ministro de Asuntos Exteriores es garantizar la seguridad y protección del pueblo danés en un mundo donde la democracia, los derechos humanos y nuestros valores se ven sometidos a una presión cada vez mayor”, expresó Kofod, quien está en el cargo desde junio de 2019, cuando asumió el gobierno de Mette Frederiksen, del Partido Socialdemócrata.

Visita oficial

En marzo de 2019, durante el último año de la gestión de Mauricio Macri, la reina Margarita de Dinamarca realizó una visita de Estado al país junto a su hijo, el príncipe heredero Federico, con parte del gabinete de ese momento y con empresarios, en un viaje que tenía como objetivo a apuntalar el vínculo comercial bilateral.

“El punto central de la visita pasa por las inversiones. En Dinamarca consideran que la Argentina es un país donde hay un clima cada vez más apto para hacer negocios”, había dicho a LA NACION el embajador Solari Yrigoyen en ese momento.

Margarita II tuvo una agenda que incluyó una reunión con Macri, visitas al Congreso y la Corte suprema, encuentros de negocios –enfocados principalmente en la energía y los alimentos- y un viaje a Tandil, donde hay una importante comunidad danesa. Luego de las actividades oficiales, viajó al norte del país.

El príncipe Federico, además, se encontró con el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, a quien conoce de sus épocas en la Universidad de Harvard, hace más de 15 años.

Antes de compartir un almuerzo, Macri le agradeció a la Reina por su segundo viaje al país, 53 años después del primero, cuando era todavía princesa. “Quiero agradecerle a la reina que haya venido con una delegación de las empresas más importantes de su país (…). Que haya vuelto es todo un honor y esperamos que sea el principio de una gran época en nuestros países”.

Según los datos oficiales, Dinamarca es el principal destino de las exportaciones argentinas a los países escandinavos y nórdicos, aunque el superávit comercial para la Argentina se convirtió en déficit en 2018 y 2019. Las últimas cifras, de 2019, dan cuenta de un déficit de 9 millones de dólares para el país (exportó bienes por 228 millones de dólares, e importó por 237 millones).

Las exportaciones se concentran en harinas de soja para la alimentación del ganado porcino danés, y las importaciones, en productos manufacturados con alto valor agregado.

El flujo migratorio entre la Argentina y Dinamarca había crecido en los últimos años, hasta la pandemia, especialmente a partir del programa “Working Holiday” (“vacaciones de trabajo”), que surgió de un acuerdo bilateral, y otorgaba un permiso residencia por un año a menores de 30 años para que viajen de un país a otro con el objetivo de “experimentar la cultura y el modo de vida de cada uno” mientras trabajaban para cubrir los gastos de la travesía. En 2018, en plena expansión del programa -que no se encuentra suspendido desde 2020 por el Covid-19-, 1400 jóvenes argentinos viajaron a Dinamarca bajo ese régimen.