Rusia registró su tercera vacuna contra el covid-19, etapa previa a la fase final de ensayos clínicos, anunció el sábado el primer ministro.
“A partir de mediados de marzo, las primeras 120.000 dosis (de la tercera vacuna) estarán disponibles. Rusia es hoy el único país que tiene tres vacunas”, se felicitó Mijail Mishustin, durante una reunión de gobierno.
Bautizada “Kovivak”, esta tercera vacuna fue fabricada por el Centro de investigación Shumakov de Moscú. Rusia ya registró la vacuna Sputnik V, en agosto, y EpiVacCorona, en octubre, y está vacunando a su población.
La primera vacuna, cuyo anunció, considerado demasiado rápido, despertó el recelo internacional, goza ahora del reconocimiento de la comunidad científica tras un estudio publicado en la revista médica The Lancet, validado por expertos independientes.
En este momento se usa en unos 20 países y las autoridades rusas están intentando lograr acuerdos de producción en todo el mundo para satisfacer la demanda. Paralelamente, se intenta aumentar la oferta de vacunas para los ciudadanos rusos.
“Estamos acelerando la producción de vacunas. Ya se han producido más de 10 millones de dosis de Sputnik V y 80.000 de EpiVacCorona”, explicó Mishustin el sábado.
El registro de “Kovivak” supone que se pasa a la fase 3 de los ensayos, prevista en marzo con 3.000 personas, según fuentes oficiales.
A diferencia de las dos primeras vacunas, esta usa un virus inactivo, una tecnología más tradicional. El ministerio de Salud explicó que es una vacuna recomendada para las personas de entre 18 y 60 años.
Rusia ha registrado 4,13 millones de casos de covid-19, cifras que le colocan en el cuarto lugar del mundo en número de infecciones, por detrás de Estados Unidos, India y Brasil.
Pero sus datos oficiales son parciales ya que solo cuentan a los fallecidos por covid confirmados tras la realización de una autopsia. El miércoles se registraban en Rusia más de 82.000 fallecidos oficiales, pero la oficina de estadística rusa consideró a finales del año pasado, que hubo en el país 162.000 muertes vinculadas con el coronavirus.