El economista Andrés Chambouleyrón explicó esta mañana cómo aumentarán los impuestos en caso de que el Gobierno elimine los subsidios a los servicios. “No creo que el Gobierno haga una eliminación repentina con el aumento de tarifas, sino que irá en línea con el aumento de los salarios en ciertos sectores”, opinó.
Hay ciertas medidas que el Gobierno Nacional tiene entre manos hace tiempo y que, aparentemente, comenzará a aplicar en el corto plazo. Entre ellas, aparece la quita de subsidios, algo que terminaría afectando directamente el costo de los servicios.
Para analizar ese impacto, habló esta mañana en la 99.9 el economista Andrés Chambouleyrón, quien señaló: “los subsidios afectan a todo el país, particularmente al Gran Buenos Aires, donde se produce el efecto volumen, porque ahí se consume el 40 o 45% de la electricidad y el gas del país. Pero tienen también un efecto precio, porque las distribuidoras compran la electricidad a un precio mucho más bajo que en Córdoba. No se entiende por qué el mismo electrón cuesta distinto, es un política discrecional del Gobierno”.
Sin embargo, se sabe que los subsidios, en algún momento, desaparecerán: “esto tiene patas cortas. Cuando tenés que revertir la situación, el impacto político es muy fuerte. Ahora deberán reducir subsidios y aumentar tarifas, en un momento económico muy complicado. Cuando el país crecía, se congelaron las tarifas y se subsidió; ahora que vamos a tener un 40% de inflación, te aumentan las facturas de luz y gas. Todo al revés”, indicó Chambouleyrón.
Lo que más inquieta a los consumidores es, sin dudas, el impacto real en dinero que tendrá esa quita de subsidios. Al respecto, el economista opinó: “asumo que el Gobierno elimina los subsidios al gas, la electricidad, al transporte de pasajeros y la empresa de agua y saneamiento, junto con el aumento de las tarifas de distribución de gas y electricidad. Solamente eso, sin tener en cuenta otros servicios, a mí me da que un usuario promedio por mes debería empezar a pagar mensualmente un valor de 960 pesos. Si se le suman los impuestos, se va por encima de los 1.000 pesos, es una barbaridad. Esto llevará a una nueva ronda de aumentos de sueldo”.
Por supuesto, no es muy recomendable aplicar la quita repentinamente, sino mediante una suba paulatina: “no creo que el Gobierno haga una eliminación repentina con el aumento de tarifas, sino que irá en línea con el aumento de los salarios en ciertos sectores. Habría que poner una tarifa social. Hay que sentarse y diseñar un plan a mediano paso bien pensado”. Pero nada de eso se puede saber aún con certeza, porque desde el oficialismo no han dado ninguna señal: “no tengo idea de lo que quiere hacer el Gobierno, porque no ha dado pautas de nada”.
Lo cierto es que los problemas no quedarán allí, porque el consumo no bajará y todo el combustible que se importa ahora deberá ser pagado por los usuarios: “haber perdido la independencia energética en materia de gas ha sido devastador para nuestros bolsillos, y lo hizo este Gobierno. La cantidad de gas importado no cambiará mucho porque el consumo no bajará aunque suban los precios, es decir que antes lo pagaba el Gobierno y ahora lo pagaremos nosotros”.