Un estudio del Instituto del Cáncer del Centro Médico de la Universidad de Duke, en Durham (Estados Unidos), ha demostrado que un fármaco aprobado en Europa para el tratamiento de la osteoporosis, detiene el crecimiento de células de cáncer de mama, incluso en aquellos que son resistentes a las terapias actuales.
Los resultados mostraron que el bazedoxifeno no sólo evita que el estrógeno alimente el crecimiento de células de cáncer de mama, sino que también marca los receptores de estrógenos para su destrucción.
“Descubrimos que bazedoxifeno se une al receptor de estrógeno e interfiere con su actividad, pero lo sorprendente entonces fue que también degrada el receptor y se deshace de él”, afirmó Donald McDonnell, director del Departamento de Farmacología y Biología del Cáncer de Duke.
Los estudios de cultivo de células y animales, mostraron que el fármaco inhibe el crecimiento tanto en las células de cáncer de mama dependientes de estrógeno como en aquellas que se volvieron resistentes al antiestrógeno tamoxifeno y /o a los inhibidores de la aromatasa, dos de los medicamentos más utilizados para prevenir y tratar el cáncer de mama estrógeno-dependiente.
El bazedoxifeno es una píldora que, como el tamoxifeno, son moduladores específicos de receptores de estrógeno (SERM). Estos medicamentos se comportan como el estrógeno en algunos tejidos, y a su vez bloquean la acción de estrógenos en otros tejidos. Pero a diferencia de tamoxifeno, bazedoxifeno tiene otras propiedades como ser degradador de los receptores de estrógenos, o SERDs, que puede señalar al receptor de estrógeno para la destrucción.
“Debido a que el fármaco tiene como objetivo eliminar los receptores de estrógenos mediante degradación, es menos probable que la célula cancerosa puede desarrollar un mecanismo de resistencia, porque se va a extraer la meta”, dijo Suzanne Wardell, que trabaja en el laboratorio de McDonnell.
“Hemos descubierto que el receptor de estrógeno sigue siendo un buen objetivo, incluso después de que se haya desarrollado resistencia al tamoxifeno“, afirmó.
Los investigadores probaron una variedad de tipos de células de cáncer de mama, incluyendo células sensibles a tamoxifeno que son resistentes al fármaco lapatinib, otra terapia dirigida que se usa para tratar a pacientes con cáncer de mama avanzado cuyos tumores contienen el gen HER2 mutante. Se ha demostrado que estas células activan la señalización de los estrógenos con el fin de adquirir resistencia a los medicamentos y, en este tipo de células, el bazedoxifeno también inhibió potentemente el crecimiento celular.