La cadena francesa de tiendas de productos culturales, declarará la suspensión de pagos. Los empleados se manifestaron públicamente por la amenaza de cierre de las sucursales donde trabajan.
La empresa francesa Virgin, que tiene 1.000 trabajadores en ese país, ha luchado por mantener las ventas de CDs y DVDs. Pero ante la creciente distribución digital de música y películas, deberá declararse insolvente. Por ese motivo, le anunciará próximamente a sus empleados la suspensión de pagos. A partir de la amenaza de cierre de su sucursal más importante, que representa el 20% de sus ventas, ubicada en los Campos Elíseos de París, los empleados realizaron distintas manifestaciones con el fin de evitar quedarse sin trabajo.
Durante 2012, Virgin Francia cerró cuatro de sus tiendas y su facturación se redujo un 34%. En la actualidad, es controlada por el fondo francés Butler Capital Partners y tiene 25 tiendas en Francia. Este último, le compró el 80% de la empresa en 2007 a la empresa francesa de medios Lagardere, que a su vez le había comprado la rama Virgin France al británico grupo Virgin en 2001.