El presidente del Consejo de Empresas Pesqueras Argentinas (CEPA), Oscar Fortunato, habló esta mañana en la 99.9 sobre la situación actual del puerto de la ciudad. Advirtió que “hoy, la actividad está complicada. Hay pocas descargas y exportaciones, y los precios de los productos han bajado mucho porque no hay compradores importantes”.
La pesca parece no salir nunca de los problemas que constantemente la afectan. En los últimos días, los sectores involucrados en la actividad están alertando a la población sobre la situación que están afrontando. Esta mañana, en el aire de la 99.9, el presidente de la Consejo de Empresas Pesqueras Argentinas (CEPA), Oscar Fortunato, indicó que “hoy la actividad está complicada. Hay pocas descargas y exportaciones, y los precios de los productos han bajado mucho porque no hay compradores importantes. Las empresas no tienen capital de trabajo”. Y destacó: “el martes nos juntamos todas las cámaras del país en una mesa de consenso pesquero nacional e hicimos una presentación al Ministro de Agricultura y al s¿Subsecretario de Pesca pidiendo una reunión urgente para exponer estas situaciones y pedir las medidas que entendemos que deben tomarse”.
Varias actividades económicas están sufriendo conflictos similares a los de la pesca, especialmente por las fluctuaciones económicas del país: “el problema serio no es sólo de la pesca. No somos más un país competitivo, la inflación interna es altísima y no se puede compensar con ningún sistema. La realidad es que quien exporta, exporta a pérdida. Los costos crecen al 25 o 30 % anual y la paridad cambiaria que compensa esa situación sube un 7% como máximo. Si lo acumulamos en los últimos 4 años, da una diferencia que no se puede manejar. Sólo las medidas de política económica pueden cambiar esto”, vaticinó el funcionario.
Según comentó, también habrá conflictos con los trabajadores, obvia consecuencia de la situación actual: “hay una presión sindical que es lógica porque la gente necesita cobrar más para vivir. Las empresas ven que hay una presión de impuestos muy alta. Esto impacta financieramente en las empresas”. Tan grave ha sido la situación en los últimos años, que Fortunato graficó el contexto de la siguiente manera: “hicimos una lista de las empresas que están en convocatoria, cerradas, vendiendo activos o reduciendo actividad; llegamos a 18 empresas en el país. Además, el principal exportador de pescado del país está en convocatoria de acreedores y despidió a más de 300 personas. Hoy, el problema es económico y financiero. No transformemos esto en un problema social y político, porque será mucho más serio”.
Al ser consultado por las respuestas políticas que se dieron a nivel local, Fortunato explicó: “el Intendente nos llamó hace dos semanas, tuvimos una primera charla. Teníamos que tener una segunda, pero no hubo llamados”. Después agregó: “desde el año 2008 empezamos a presentar documentos diciendo que la situación se agravaba. Hay una nota de una ONG ambientalista donde, con un gráfico, demostraron la claridad de cómo cambió la ecuación económica de la actividad pesquera desde 2004 a esta parte. El punto donde todo comenzó fue en el 2008”.
La falta de competitividad ha generado una recesión profunda en el sector, y eso es lo que quieren cambiar: “se están cayendo todas las economías regionales y no somos competitivos en el mundo. Más en la actividad pesquera, donde exportamos el 95% del producto. Estamos pidiendo mejoras de la competitividad, con algunas medidas que entendemos que pueden ser tomadas y nos darán otra situación”.