Será por un valor de 800 millones de dólares. Además, venderá parte de los yacimientos a la argentina Pluspetrol, por US$ 217 millones.
YPF finalmente cerró la compra de la filial argentina de la norteamericana Apache, por US$ 800 millones en efectivo más la asunción de deuda bancaria por otros US$ 52 millones. YPF ya pagó un anticipo de US$ 50 millones y se espera que la transacción se complete en los próximos 30 días, con fondos propios. Con la compra, la petrolera estatal dijo que incrementará un 14% sus reservas de hidrocarburos y un 15% la producción de gas; además, podrá acceder a crudo “Medanito”, la variedad más demandada que utilizan las refinerías locales. Apache era la quinta productora del país.
La operación tiene dos partes: por un lado, YPF comprará los activos de Apache y, por otro, le venderá parte de esos yacimientos a la argentina Pluspetrol, por US$ 217 millones. Serán 7 yacimientos de hidrocarburos no convencionales en Neuquén.
Según explicó YPF, la compra le permitirá a la empresa (que ya es primera en producción de petróleo) posicionarse como el principal operador de gas en el país.
Según Miguel Galuccio, CEO de YPF, sumarán “una operación en actividad con importantes reservas de gas convencional y recursos no convencionales”.
Apache tiene operaciones en Neuquén, Río Negro y Tierra del Fuego, con una producción diaria de 46.800 barriles equivalentes de petróleo (boes) y reservas probadas estimadas en 135 millones de boes. Cuenta con más de 350 empleados directos y una importante infraestructura de servicios petroleros. Como YPF no estaba en la Cuenta Austral, la operación le permitirá entrar a esa zona del país.
Galuccio señaló también que ahora aumentarán “de inmediato” los equipos de perforación para acelerar la producción, especialmente de gas, “y trabajaremos conjuntamente con las autoridades nacionales y provinciales para asegurar el crecimiento y desarrollo sustentable de las economías regionales involucradas”. El comentario llama la atención justo cuando desde la gobernación neuquina había trascendido la amenaza de reversión de áreas de Apache por falta de inversión, y cuando se estuvo negociando la situación de las regalías por el acuerdo entre las petroleras y el Gobierno.
A partir de la adquisición de Apache, YPF acordó también la venta a Pluspetrol de 1.240 kilómetros cuadrados en Vaca Muerta, por un monto de 217 millones de dólares, con vistas a la exploración y delineación del área de alto potencial, así como la implementación de un proyecto piloto para la extracción de gas y petróleo no convencional. La mayoría de la superficie resultante de esta asociación está comprendida por activos adquiridos de Apache.
Galuccio destacó las credenciales de su nuevo socio: “estamos muy satisfechos de asociarnos a una compañía como Pluspetrol, que se destaca por su profesionalismo. Y que, además, fue la única que junto a YPF revirtió el declino de la producción durante 2013”.
El acuerdo entre Pluspetrol e YPF prevé lograr una asociación en partes iguales sobre la distribución de las participaciones de los activos de Apache, indicó la firma de la familias Poli y Rey. Son siete áreas en Neuquén, todas en la formación Vaca Muerta y no convencionales. La operación convierte a Pluspetrol en un jugador de peso en no convencional, donde tenía poca participación. El plan de inversión conjunto con YPF para los próximos años rondaría los US$ 300 millones.
YPF ya cuenta con 12.000 kilómetros cuadrados en Vaca Muerta, con más de 100 pozos perforados, 19 equipos de perforación en la zona y una producción diaria de más de 13.000 boes de petróleo y gas.