Los años perdidos

Central 874

Emergencia económica municipal. Un informe de la situación financiera de la municipalidad habla de la posible malversación de fondos y pésima administración. Según el concejal Cano, la situación amerita que se declare la emergencia económica en todo el partido.

Con ese nombre, “Los años perdidos”, el bloque de concejales Agrupación Atlántica elevó a la presidenta del Concejo Deliberante un informe de la situación financiera del municipio, específicamente de los últimos seis años de la gestión del intendente Pulti. Lo hizo con el fin de sostener el pedido de que se declare el estrado de emergencia económica financiera y administrativa para el partido de General Pueyrredon.
Según se argumenta, durante el periodo que va desde 2008 al 2013, los recursos disponibles de origen municipal perdieron significación en un 12%, mientras que los de origen provincial crecieron un 3%, y los de origen nacional crecieron notablemente en un 64%.
Pero por otra parte, la gestión Pulti creó nuevas tasas: Contribución para la Salud, Fondo Promoción Turística y Girsu, lo cual significa un incremento del disponible. Según su expresión en moneda constante, se puede decir que los nuevos recursos de origen municipal alcanzaron para el periodo a $220.191.769. Este monto de recursos por sobre lo normal, es dinero con el que no contaron administraciones anteriores. Pero sin embargo, las cuentas no cierran. La cuestión es entonces, establecer por qué.
En la presentación ante la presidenta del Concejo, se detalla que, a criterio de los ediles del bloque firmante, las características distintivas de estos 6 años -los que van desde 2008 hasta 2013- han sido fundamentalmente gastar por encima de lo recaudado, además de la malversación sistemática de los fondos afectados, a partir del ejercicio 2009. Se indica además que ha existido una contabilidad creativa para disimular u ocultar el verdadero déficit, y la triplicación de la planta política de funcionarios. Se cita la evidente creación de nuevas secretarías y entes descentralizados, así como el desprecio por las normas y procedimientos administrativos, además del desconocimiento incluso de los requerimientos y observaciones del Honorable Tribunal de Cuentas  de la Provincia de Buenos aires, a quien el intendente Púlti podría decirse que desconoce.
Según el informe, ha habido en el Ejecutivo una toma de decisiones enfocadas en el corto plazo, sin considerar los efectos de las mismas en el mediano y largo plazo. Como aseguró el concejal José Cano en entrevista en la 99.9., el intendente Pulti era muy combativo desde su banca cuando era concejal, pero después se olvidó de que las necesidades de verificar las cuentas seguían existiendo. Cano fue el primer secretario de Economía de Pulti, y afirmó: “Hoy estamos dos veces y media peor que en aquel momento”, refiriéndose a la etapa en la que el actual intendente inició su mandato.

Dispendio

Según afirmó Cano, “nunca se gastó tan mal”. Por esa razón han elaborado un informe detallado que a lo largo de 33 folios demuestra la situación actual de la economía de la municipalidad en números objetivos, y las verdaderas cuentas que se han tratado de ocultar a la opinión pública, y aun al Tribunal de Cuentas.
Se indica que hay una sobrecarga de personal político y jerárquico, producto del pago de favores políticos, y que esto se traduce en un crecimiento de la estructura de secretarías, subsecretarías, direcciones generales y directores coordinadores. Pero esto no es todo: según se afirma en el informe, hay un “entendimiento” entre el Ejecutivo y el Sindicato de Trabajadores Municipales, en virtud de lo cual se han producido reencasillamientos que han provocado un aumento de los cargos superiores, y una inversión de la pirámide ocupacional.
Algunos afirman que estos llamados reencasillamientos son en realidad aumentos encubiertos para determinados empleados seleccionados. Esto no significa que todos ellos sean acordados de manera ilegal: en algunos casos, las modificaciones de cargo fueron justo reconocimiento de méritos y calidades como agentes municipales, pero muchos otros merecían el reconocimiento y no fueron ni siquiera considerados.
Además de todo lo expuesto, cabe destacar el abuso que ya es de público conocimiento pues ha sido largamente tratado en estas páginas, en el otorgamiento de horas extras y remuneración por resultados. Estas irregularidades han provocado que niveles intermedios del escalafón municipal ganen mucho más que el personal con mayores responsabilidades, como por ejemplo los jefes de departamentos y directores, cuyos ingresos son menores que los de un inspector de Tránsito. El agente de calle obviamente sale a buscar la multa, ya que gana un porcentaje sobre ella.
Sin duda ya es evidente que el dinero no se usa para lo que debería, pero un repaso sobre las áreas de servicios demuestra que ellas no cuentan con los elementos de trabajo necesarios para cumplir sus tareas. El abandono edilicio de los lugares de trabajo y atención al público es tal, que si tuvieran que ser habilitados por la municipalidad, seguramente no obtendrían la autorización para funcionar.
De más está decir que se detallan además verdaderos horrores administrativos, como adjudicaciones directas, compras y contrataciones sin respetar las normas vigentes, el otorgamiento de subsidios en forma discrecional y caprichosa, que en algunos casos podrían evitar procesos de licitación, llamados a concurso, decretos extemporáneos, etc.
La presentación ante el HCD además se refiere a cuestiones vinculadas con una notoria falta de transparencia en cuanto al presupuesto comunal y al destino que se decide para los fondos públicos, el cual ha concluido en un verdadero dispendio que nadie parece poder evitar.
En un principio, según se indica, la mayoría automática que el partido del intendente Pulti tenía en el Concejo -que no puede ser cuestionada desde su legitimidad- y que se mantuvo hasta el 10 de diciembre de 2013, hizo que el presupuesto comunal no fuera una herramienta para conocer el plan que se iba a llevar a cabo durante un ejercicio económico. Solamente contenía datos, y no información que permitiera la evaluación de acciones prioritarias, sus costos o alternativas, para satisfacer una misma necesidad.
Si bien esto se ha revertido, en cuanto a la composición de las representaciones en el Honorable Concejo Deliberante, la acusación indica: “el intendente Pulti sigue sin informar lo que no quiere que se sepa”. La frase se refiere específicamente a subsidios, contrataciones directas, convenios sin autorización del HCD, e incumplimiento de normas. Más allá de lo expuesto, lo preocupante es que aún hoy no se envían informes en el tiempo y forma reglamentarios.
A modo de ejemplo, la página web del municipio, que ha recibido premios, no parece cumplir con la función de enlace que permita la circulación pertinente de información necesaria con la población. Dicen los ediles que se trata simplemente de “una parte componente del relato oficial”. Su información está atrasada, incompleta, confusa y, en algunos casos, evidentemente manipulada.
Baste decir que en la página, los fallos del Honorable Tribunal de Cuentas constan hasta los emitidos durante el año 2008. La información sobre la planta de personal del EMDER se encuentra obsoleta, pues responde a la data del 30 de abril de 2013, y la ejecución del presupuesto tiene hoy tres meses de atraso.
La información sobre los estados económicos está demorada en seis meses, y hay folios de decretos reservados que se conocen en la página mucho tiempo después de que han sido aplicados.

La ordenanza

Toda la situación hasta aquí descripta es el fundamento que permite que los ediles mencionados soliciten la declaración de un Estado de Emergencia Económica, Financiera, Administrativa y Falta de Transparencia, el cual debería mantenerse hasta el próximo mes de marzo.
En ese lapso se deberán suspender los ingresos de personal a planta permanente o temporaria, a excepción del  personal relacionado con el Operativo de Seguridad en Playas. Cualquier otra excepción debería ser aprobada por el Honorable Concejo Deliberante.
De la misma manera, será necesario suspender el otorgamiento de subsidios, salvo expresa autorización previa del Honorable Concejo Deliberante, así como el otorgamiento de exenciones de tributos municipales.
El proyecto de ordenanza elevado, ahora a consideración de la Presidencia, propone además la necesidad de constituir una comisión mixta, integrada por miembros del Honorable Concejo Deliberante y del Departamento Ejecutivo, para así realizar un verdadero seguimiento de las cuentas municipales, que abarque tanto la administración central como los entes descentralizados.
Los ediles del bloque firmante solicitan que, al momento de la confección del Proyecto de Presupuesto 2015, se utilice la técnica de planificación y presupuesto en base cero, que permita establecer una clara relación entre los recursos requeridos y los resultados esperados, para cada uno de los programas a desarrollar.
Resta ahora esperar cuál será la conducta adoptada por los concejales de los demás bloques, que hasta el momento no han demostrado su voluntad de desprenderse de la evidente situación irregular que la actual gestión ha mostrado en lo administrativo y económico. Ni siquiera cuando los hechos demuestran la imputación que pone a Adrián Alveolite al borde de un proceso penal, que amenaza con ensombrecer al actual gobierno, y quebrar una impunidad que parecía eterna.
En el caso de que decidan que las cosas se caen de maduro y que es necesario prestar apoyo, la ordenanza será aprobada en breve, y entonces  será la comisión mixta así constituida la que procederá a la revisión de los actos administrativos y los antecedentes de los nombramientos de personal de los últimos doce meses. También se encargará de revisar las promociones de personal de seis meses atrás, así como los pases del pasado año y medio, porque se sabe que un número importante de empleados que revistaban como dependientes de bloques políticos, de pronto fueron reubicados en la planta de personal, permanente o temporaria.
Un papelón. Que la gestión que llegó a ocupar el Ejecutivo prometiendo transparencia absoluta y terminar con la corrupción enquistada, deba vivir los estertores de su agonía con una comisión que deshaga sus desmanes, porque ya no hay dinero ni para pagar la luz, es sin duda un papelón.