Patear hormigueros

Consejo escolar | Con un Consejo Escolar intervenido bajo la figura del advocador, los funcionarios provinciales se presentan como los restauradores del orden perdido. La verdad es que se apropiaron de una investigación que había hecho la presidenta Badié durante 2017, y se hicieron con los méritos. Una jugada política de las que saben hacer.

Después de la intervención del Consejo Escolar de General Pueyrredon, la presidenta del cuerpo, Sofía Badié, sigue cumpliendo con su labor. Ya no tiene poder de decisión y son pocos los que siguen a su lado: “uno se da cuenta la complejidad del Consejo Escolar cuando está adentro. Hasta los mismos interventores se han asombrado de lo complejo que es. No la están pasando bien. Nosotros no tenemos poder de decisión ni firma, pero estamos guiándolos”, explicó. Agregó que no hay corrupción en el Consejo Escolar y que ese no es el motivo real de la intervención: “quiero llevarle tranquilidad a la comunidad, no me intervinieron a mí, sino a un organismo de 10 consejeros. Les puedo asegurar que el Consejo Escolar está limpio, no hay más corrupción, se rompieron los kioscos, se patearon hormigueros, he seguido con mi auto a transportistas, he ido indignada a los comedores escolares cuando faltaban los alimentos para los chicos y denunciado muchas cosas desde que asumí”.

Lo cierto es que la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia dispuso la intervención, pero en cuanto la medida fue confirmada por los funcionarios de la cartera del ministro Gabriel Sánchez Zinny, le quitaron responsabilidad a la actual presidenta del cuerpo: vincularon la decisión a una auditoría desarrollada a principio de año.

El subsecretario de Educación, Sergio Siciliano, y el director provincial de Consejos Escolares, Marcelo Di Mario, señalaron que la medida surgió tras haberse detectado —mediante esa auditoría— una serie de irregularidades en las empresas proveedoras de servicios de transporte, infraestructura y alimentos. “Esta medida no es una medida sencilla ni agradable de tomar, priorizamos a los alumnos y docentes que están en las escuelas”, señaló Siciliano y aseguró que la provincia volcaría recursos humanos, económicos y administrativos para que la gestión del Consejo Escolar se vuelva eficiente. La medida tendrá un plazo de 180 días y estará a cargo del director provincial de Gestión Educativa, Roberto Angrisani.

Según aseguraban ellos, la auditoría había dejado al descubierto “algunas situaciones administrativas que queremos investigar, que queremos transparentar y queremos resolver sin caer en situaciones o rehenes de algunos proveedores y empresas que vienen ejerciendo hace muchos años un servicio o un mal servicio a los establecimientos educativos de Mar del Plata”.

La verdad

Pero ¿sería tan así? Desde un principio, Siciliano le quitó responsabilidades a la actual presidenta del cuerpo y a los consejeros escolares en ejercicio: “Queremos reivindicar la tarea de Sofía Badié al frente del Consejo y reivindicar también la tarea de los consejeros. Esta intervención no tiene nada que ver con ningún tipo de sospecha hacia los consejeros escolares y es importante dejarlo en claro”, aclaró el funcionario. Y agregó: “Se viene a ordenar a aquellas cuestiones administrativas y revisar las situaciones en la que se encuentran las empresas proveedoras de transporte, de infraestructura y, obviamente, la de servicio alimentario”, decía, a la vez que le daba al procedimiento unos aires de restauración que no parecían cerrar del todo, considerando que el Consejo estaba a cargo de alguien que ellos mismos eximían de culpas. ¿Existió la mentada auditoría iluminadora?

Según aseguraban algunas fuentes, la versión de la intervención comenzó a circular tras la salida del tesorero del cuerpo en medio de denuncias de irregularidades. En ese marco, se produjo el cambio de autoridades: Ricardo Senatore renunció a la presidencia y volvió a ocuparla Sofía Badié, quien ya había ocupado ese puesto cuando Cambiemos se hizo cargo de la gestión marplatense.

Con la sorpresa de la intervención, Badié había dicho en declaraciones a la 99.9: “fue una noticia muy conmocionante ser intervenidos. Las hipótesis que se analizan son muchas”. Reconocía que el funcionamiento en los últimos meses no había sido el ideal, por lo que la propia Badié debió volver a ponerse al frente del organismo después de que había elegido no hacerlo a fin del año pasado: “el Consejo Escolar es una gran máquina. En diciembre decidí no continuar al frente, después volví a asumir el cargo porque había muchas renuncias y no se podía funcionar. Somos pocos consejeros los que estamos trabajando ahora a pleno para que esto se pueda sostener”, advirtió.

Desde inicios del 2018, Claudia Píccolo asumió la tesorería y comenzó a denunciar varias irregularidades, lo que llevó a poner en alerta a distintos actores: “Píccolo asumió la tesorería y todos nos vimos impactados por sus anuncios sin ser consultados. Las irregularidades debería explicarlas; la auditoría marca cuestiones administrativas de forma, como tener un legajo no foliado, que no tiene gravedad. El problema surgiría cuando hay malversación de fondos o se roba dinero, algo que puedo asegurar que no sucede”, dijo Badié.

También dejó en claro que si se piensa asumir un cargo como el de consejero escolar se debe tener una responsabilidad concreta porque la tarea es muy importante: “los consejeros escolares tenemos que tener mucho coraje cuando asumimos porque debemos denunciar y para eso tenemos que estar limpios. Les pido a los consejeros, de acá en adelante, que sean capaces de denunciar, tener coraje para dejar las oficinas y los cafés para recorrer las escuelas. Tenemos que estar al servicio y a la par de los docentes”.

Los datos

La cuestión es que la tan mentada investigación de trasportes no es ocurrencia de la auditoría de la Provincia, sino una transcripción de la investigación realizada por la propia intervenida Badié durante el 2017, cuando se ocupaba de seguir con su propio vehículo a cada uno de los micros que prestan servicio en las zonas rurales, para verificar que los vehículos que realizaban los recorridos fueran los mismos que se habían postulado en las licitaciones y adjudicaciones, con la misma calidad y dominio, y los mismos recorridos que se estaban cobrando.

De ese trabajo personal surge un informe que ahora parece ser mérito de los interventores del ministerio, que vinieron a restaurar el orden, con el fin de proseguir con una batalla que la administración provincial parece haber declarado a esta ciudad.

Para más precisiones: en un primer informe del 24 de octubre, Badié verifica el curso de un micro que se dirige desde Batán hacia el paraje Los Ortiz, y observa que los recorridos incluyen cuatro colectivos, cuando el Consejo Escolar habría contratado seis.

El 26 de octubre, Badié daba cuenta de haber seguido el recorrido del colectivo que se dirigía al Paraje San Francisco, y decía que se verificaba un rebote: es decir que un micro prestaba un servicio una vez que había dejado a los alumnos en la escuela secundaria, cuando se estaba pagando el colectivo específico contratado.

En cuanto al trasporte a Santa Paula, presenta un informe cuyo resumen indica:

Observaciones generales y resumen:

Renglón 31 y 32: regreso de EES 39 hacia Santa Paula NO SE REALIZA

Renglón 43: Sólo asiste 1 micro de 3. Ese mismo realiza a su vez el regreso del renglón 49, por lo cual el renglón 49 NO SE REALIZA.

Renglón 36: El regreso no se realiza.

Renglón 37: La llegada de alumnos se constata en forma correcta.

Renglón 37 A: No se constata llegada de alumnos de dicho renglón.

Renglón 38: No se constata llegada de alumnos de dicho renglón.

Renglón 48: No se realiza. Los alumnos de primaria se retiran con los del secundario en el micro del renglón 43.

Renglón 49: No se realiza. Los alumnos llegan con el recorrido 46 de EES39.

Renglón 49 A. No se realiza. Figura que debería ser una combi.

Renglón 39: Correcto el regreso del TM JI 923

Renglón 40: Correcto el ingreso del TT JI 923

Renglón 51: Se realiza. Esto difiere de lo observado por Logística. Lo hace el micro blanco FKX 387.

Renglón 52: No se realiza.

 

De aquí que, como vemos, fue la propia gestión la que se ocupó de verificar el cumplimiento del servicio, o de dar cuenta de sus irregularidades. Tal como había declarado Sofía Badié, se había ocupado ella misma de patear los hormigueros históricos. Pero el punto no convino a la gestión provincial, que inició el proceso político necesario para hacerse de los méritos. Con razón tanto énfasis en dejar a Badié fuera de toda sospecha.