Plata hay, pero se la roban

Un debate constante es si la Argentina es, o no, un país rico. Los economistas, en general de cuño liberal, sostienen que es un país que se auto percibe rico y en rigor es pobre. Los números lo desmienten: tanto los millones de dólares a resguardo de la voracidad del Estado, así como también los millones que se van en corrupción y gasto improductivo.