Historias que merecen ser escuchadas
La lucha del pueblo armenio por ser escuchado trasciende las generaciones, y año a año, pese a las coyunturas políticas, se hace un lugar en la agenda global.
Editoriales desde la redacción de N&P
La lucha del pueblo armenio por ser escuchado trasciende las generaciones, y año a año, pese a las coyunturas políticas, se hace un lugar en la agenda global.
El mundo se conmueve por tramos, momentos, fotos, que un día después son reemplazados por otros tramos, otros momentos, otras fotos. Así, el rapto de las niñas por BokoHaram en Nigeria motivó a Michelle LaVaughn Robinson, más conocida como Michelle Obama, a utilizar una selfie para pedir que “devuelvan a nuestras niñas”. A un año del tremendo hecho, el tema parece olvidado.
No es la antigua pregunta que formulaba en su espacio televisivo Carlos Balá, aquella que abarcó a tres generaciones: “¿qué gusto tiene la sal?”, sino el motivo de la mayor cobertura periodística metropolitana y por ende nacional sobre el apego de la sociedad argentina a las leyes y a comerciar en un contexto acorde al cumplimiento de las mismas.
Dicen los que abrevan en la historia que éste es el período de menor violencia en la vida de los pueblos. Cuesta creerlo. La violencia desatada por las facciones islamistas en Medio Oriente, África, Asia, y los impactos que la misma provoca en terceros países, como por caso en muchos de Europa, son aterradores.
En esta Semana Santa, Jorge Bergoglio, el papa Francisco I, ha señalado la indiferencia de la humanidad y los gobiernos por la continua matanza de cristianos a manos de grupos islamitas.
El siniestro de Germanwings sobre los Alpes franceses conmovió al mundo y dio un varapalo muy fuerte a nuestro país por la pérdida de vida de tres compatriotas que viajaban a bordo de este vuelo de bajo costo.