Los números no mienten I. Informe de la Procuración General de la Provincia desnuda la situación del Departamento Judicial Mar del Plata. Revela que en 2015 tramitaron 31.521 causas penales, 76% de las cuales fueron enviadas a archivo, esto es, 23.086, que quedaron sin resolución judicial alguna. Sólo un poco más de 1.600 llegaron a la instancia de juicio. MIserable el desempeño de los dirigidos por Fabián Uriel Fernández Garello.
Los números no mienten II. La Fiscalía 10, que cuenta con la capitis deminutio de su fiscal principal, Javier Pizzo, -que se siente jugando en Aldosivi contra equipos de la Premier League-, llevó en 2015 140 causas. En la Fiscalía 10 son tres fiscales, cuyo magro resultado involucra apenas el 3.65 de las causas ingresadas. Por efecto contrario, la Fiscalía Descentralizada de Balcarce llevó adelante 4.143 denuncias. El CATI, la luz de los ojos de Garello, requirió cuatro allanamientos en 2015; la de Delitos Económicos, 23, y la Descentralizada de Balcarce, 303. O hay un universo delictual inmenso en Balcarce, que excede por mucho a Mar del Plata, o algo no está bien en la operatividad local. Si tomamos los dichos del fiscal del fuero de menores Martínez Soto, aparecen pistas claras del porqué de estos números.
A los gritos. Sus conmilitones de toda la vida dicen que “el Pelado se está haciendo grande, se cruzó a los gritos con el Viejo”. Del otro lado dicen que se está equivocando, y le quieren jugar una guerra de desgaste por las redes sociales usando a un sucio ordinario que se cree el journalist de estos años. Como sea, la trifulca entre el secretario de Gobierno Alejandro Vicente y el intendente Arroyo fue comidilla en el Palacio los pasados días. La sangre no llegó al arroyo, y después del griterío llegó el buscar un acuerdo de qué hacer con los carteles de LED que Florencio Aldrey, el cumpleañeros, colocó en el shopping de la vieja Terminal de Ómnibus, en abierta violación de las ordenanzas municipales.
Cruces incómodos. Vividos por espectadores curiositos como si fuera la previa de una noche de boxeo. Uno de ellos, en el vuelo de retorno a MDP desde CABA, en el que compartieron viaje Emiliano Giri y el galaico emprendedor dueño de casi todo. El otro, en el restaurant “La Fontanella”, donde se cruzaron el último viernes el director de este medio, José Luis Jacobo, y el ex intendente sometido a proceso penal y citado a indagatoria para el 21 de junio, Gustavo Arnaldo “Cospelito” Pulti. En ambos casos se dio una incómoda situación de hacer como que “no te veo”, en tanto presentes en el lugar, tanto en el avión como en el restaurant, intercambiaban sonrisitas pavas y miradas cómplices.