1) Christian Moix
(Anda entre líneas)
Le agrada presentarse como operador político, pero es otro atrevido más en la larga lista de atrevidos de la ciudad. Va del elogio al insulto y la calumnia al ritmo de sus delineados intereses. Placebo le dicen: no le da para ser bueno, ni malo.
2) Raúl Lamacchia
(“El Rulo” viene por los negocios)
Retornó como los cazafantasmas a traer su visión negativa de las potenciales inversiones en la ciudad. Como Florencio Aldrey, se ve que quiere una ciudad para poquísimos. Entre los cuales él se cuente entre los primeros, claro.
3) Fabián Portillo
(La suma del poder)
Ganó por trescientos votos una elección de medio término en el Colegio de Abogados que lo coloca como un auténtico winner. Bajo perfil, mucho trajinar los pasillos, buena performance.
4) Gustavo Schroeder
(Second chance)
Fue, volvió, ¿vencerá? De perfil adusto, sabe de qué se trata esto de lidiar con la hacienda pública. No es fácil lo que falta, pero las reuniones en La Plata le dieron buena aspectación. A no confundirse: el sí no lo tiene flojo.
5) Agustín Cintos
(Probando la hiel local)
Joven valor de la nueva guardia política, perfil bajo, tipo sensato y metropolitano, adaptándose a la compleja y acomplejada Mar del Plata. ¿Hacía falta llevarlo al brindis en el Hermitage? De a poco, por favor, que tanta mediocridad junta puede atosigar al más entusiasta.
6) Antonio Fresero
(Nada que ver)
Organizador de las jornadas de trueque en Plaza Rocha, se define como un outsider, sin esponsales políticos con nadie. Ciudadano de a pie, asistido por ocasionales pululadores de la política que busca rédito. Lástima.
7) Marcos Gutiérrez
(Busca una oportunidad)
Concejal del FPV, se atribuye haber evitado “la primera represión de Arroyo”. Tanta literatura progre le abolló un poco el entendimiento: ¿la primera? ¿Y cuáles otras estará imaginando?
8) Amalia Rey
(Mira de afuera)
La presidenta del Consejo Escolar dice que no sabe, que no entiende cómo se cocinaron los contratos para llevar chicos de las áreas rurales de la ciudad en vehículos no autorizados. Lindo interrogante. Pero ella está del lado de los que deben responder, no de los que preguntan azorados.
9) Leandro Bacchiocchi
(Parla no le falta)
Se autodescribe como el único y magnífico, el más barato y adecuado para ofrecer un servicio de transporte escolar para el área rural. Una ganga lo suyo, che. Qué más querés. Otras voces dicen que no es tan bueno, ni tan adecuado, y si es barato es porque luego será caro.
10) Walter Martínez Soto
(Deberían escucharlo)
Deberían escucharlo. Sabe de qué habla, y se le nota la pasión por su trabajo en la Fiscalía de Menores. Una voz de nota, infrecuente en su ámbito.