“¿Cuenta en Suiza? No, piso en Manhattan”. Aquí acaba el dinero de políticos corruptos

Un buen día, durante el segundo mandato del presidente taiwanés Chen Shui-bian, varias personas cargadas con lo que un testigo describió como «cinco o seis cajas de fruta” entraron en la residencia presidencial en Taipei. Después, se supo que en el interior de las cajas había 6 millones de dólares. Se trataba de un soborno para la primera dama, Wu Shu-jen, “lubricante verde” para animar a su marido a beneficiar a una empresa que buscaba una fusión.