El tema de la semana, la situación de la concesión del paseo Las Toscas, los balnearios y el Paseo Hermitage, les estalló a muchos en el rostro por las 4 páginas que el multiLadrey le dedicó a la cuestión, destratando al intendente y mintiendo y fabulando con respecto a la situación legal de Hermitage SA como concesionario de estos bienes públicos. Lo que tiene que ver exactamente con lo que ocurre al respecto, lo tratamos en profundidad en el artículo central de esta presente edición. Pero aquí iré con algunos tópicos de la política.
Quien se extrañe porque políticos de la ciudad –concejales, básicamente- salgan al cruce de una hipotética acción del Ejecutivo sobre el mencionado tema, no conocen la carnadura mediocre de una dirigencia servil que, de someterse y arrodillarse, tiene amplia historia. En la edición 1092 retratamos tal como fue el proceso de apoderamiento de Aldrey Iglesias del sector, al que siempre consideró suyo. Como si de un bien condal se tratara, los vasallos de turno se lo entregaron entre sibilinos argumentos .Todo inició con Elio Aprile, la concurrencia de José María Conte y Jesús Porrúa, y cerró en la intendencia de Daniel Víctor Katz Jora, aupado por las interpretaciones cuando menos curiosísimas de Oscar Pagni, para justificar una entrega patrimonial vergonzosa.
Un estudio técnico económico que se concluirá esta semana indica que cuando menos el daño patrimonial provocado por la sevicia de los citados y otros concurrentes llegaría a los noventa millones de pesos, sin actualización ni multas. Hay actores poco citados, como es el caso de Sergio Paleo, que ocupó un lugar central en el armado de la trama artificiosa para desalojar a anteriores concesionarios y dar espacio a una entrega directa amañada que envicia de origen la concesión.
No hay autoritarismo o venganza. El imperio de la ley es para todos. Difícil que lo comprenda Aldrey Iglesias, que creyó siempre que la ley era para los otros. El pequeñín coruñés que decía “invierta, hombre; invierta, que al intendente y al Concejo Deliberante se los garantizo yo”, hoy deja expuesto que a los concejales los controla, pero al intendente no. El hombre del piloto, que ratificó que irá por su reelección, da la madre de las batallas por recuperar la dignidad republicana que tibios y acomodaticios, aquellos “mediocres” de los que habló oportunamente Russak, entregaron, a cambio de la moneda vil de una cierta impunidad.
Esta es específicamente para Oscar Pagni. Primero, es de Perogrullo –en esta ocasión no hablo de GAP- que los contratos están para ser cumplidos por las partes en igualdad de condiciones. No es cierto que haya temas más importantes que otros. Y por último, nada es más importante que la dignidad, y de eso se trata: nada más y nada menos que de la dignidad.