1) Hernán Mourelle
(entre la eficiencia y la crítica)
El secretario de Hacienda es una compleja mezcla de eficiencia y actor disruptivo irritante. Amén de que la curul Coria seguirá cuestionándole hasta de qué lado se hace la raya del pelo, el tipo el 31 de agosto pagó los salarios de todos los municipales. Inédito.
2) Vilma Baragiola
(Vilma Va)
No se baja, y con agenda propia va por la PASO 2019. Acordó con consultora de alto nivel para tener datos propios. En semanas habrá data para compartir. En medio de este tremendo bolonqui, es un canto a la fe pensar en el año próximo.
3) Pablo de La Colina
(buscando y atajando)
Inició una búsqueda que parecía extraña: detectar los casos de tuberculosis en General Pueyrredón, una tarea que estaba en manos del INE y sólo cubría burocráticamente aquello que le llegaba casi como tarea de oficina. Y bueno, el que busca, encuentra. Ahora hay que curar.
4) David Bruna
(baja eficacia, muchas preguntas)
Fiscal de delitos económicos, de tiempos largos y resoluciones laxas. Obvio que Stornelli no lo tendría en su equipo. Mañas de la aldea, demasiados conocidos comunes, poco apego a la verdad.
5) Gustavo Galván
(turnos del HIGA, un mal clásico)
Los turnos en el HIGA son un calvario de años. Tanto hablar de cambio y que todo siga igual, enoja. Hoy, están en el ojo de la tormenta con una causa por un 0800 que funciona una vez por semana y “coleros “que se ganan una monedita pasando frío por otro que pena por una atención pública lenta, demasiado lenta.
6) Diego Gancedo
(da batalla al narco)
Desde que llegó, le cambió la dinámica de la operatividad al área de narcotráfico. Hay operativos casi a diario. Voluntad y compromiso le ganan a la permanente falta de recursos.
7) Mario Rodríguez
(pide acción y basta de silencio)
Obviamente parado enfrente de la conducción de su partido a nivel nacional y provincial, pide alto pronunciamiento sobre la situación económica. Que su jefe Ricardo Alfonsín elogie a Felipe Solá no ayuda a encender posiciones de quienes abrazaron a Cambiemos como instrumento de poder y gobierno.
8) Fabián Portillo
(cambiando el ritmo)
En el Día del Abogado, sacudió el tablero. Pronunció duro discurso pidiendo que la justicia se ponga al servicio de la ciudadanía, que trate con respeto al abogado y que trabajen mancomunadamente de manera responsable. Nada te pide el cuerpo.
9) Carlos Alberto Ronda
(más lento no se puede)
Intendente del partido de Mar Chiquita, se le llevan la arena de las playas a espuertas, pero no hace nada de nada: sólo contempla en triste letanía. Más lento no se puede, decía el genial René Lavand.
10) Sergio Fares
(juega a lo grande)
Salió a una patriada: vender y comprar dólares al mismo precio sin spread, casi una auténtica utopía en la feria persa del dólar cruel, que una vez más enloquece la economía y la vida de los argentinos.