1) Alejandro Salaverry
(si habla, caen varios)
Asesino del policía Agustí. Estuvo prófugo 16 años hasta llegar a Tribunales para descaradamente solicitar e irse con el certificado de prescripción de su carga penal. Con una causa abierta en Morón, nadie pareció advertir que debía que quedar en detención. Todo raro. Si habla…
2) Alejandra Ayek
(¿y ahora?)
Hizo campaña interna anunciando que se llenarían los bolsillos con el retroactivo no pagado por la administración Arroyo. El fallo de la Cámara Contencioso Administrativo le dijo «nones» a la pretensión. Veremos de qué se pinta para explicar.
3) Lucas Fiorini
(¿nueva derecha cristiana?)
Émulo de la derecha religiosa estadounidense, Lucas avanza con una alianza celeste anti aborto pro derechos del niño en una unión de grupos cristianos. Puede ser un impacto enorme en el plano electoral, o tremendo fiasco. Se verá.
4) Horacio García
(“Toto” no leyó «Soy Roca»)
Lo cruzaron feo a don “Toto” por decir que “mar del plata goza de un momento de seguridad notable”. Si hubiera leído «Soy Roca», habría recogido las palabras del ex presidente a su secretario Gramajo: “en política, el que habla se jode”. Y, la más de las veces sí, se jode.
5) Nicolás Lauría
(Fe montenegrista)
Dejó el partido FE por una nueva convicción. De ahora en más, montenegrista… si algo así existiera. Unido al club de los que pertenecen, el ex basquetbolista se apunta a los años por venir en la política, con el sueño de ser intendente.
6) Amado Boudou
(apañado)
Estudioso el marplatense. Si sigue estudiando y haciendo méritos, quizá ya no lo excarcelen, o le den la condicional; dos cursos más de tarot, uno de macumba brasilera, y le borran la condena, le piden perdón, y lo compensan económicamente por los disgustos recibidos… sólo en Peronia.
7) Magalí Marazzo
(pieza clave)
Blonda ex Reina del Mar y de los Pescadores. Con tecnicatura terciaria, se encuentra al frente de la Casa del Puente. Ha conseguido más recursos para el área cultural de la ciudad que el propio secretario de Cultura. Eso sí: tiene un acceso al WhatsApp de Olivos, que más de uno envidia.
8) Miguel Martínez
(¿la mesa donde esta?)
Muchacho ambicioso. Explotó la cafetería del Museo Mar sin contrato, y pagando un canon ridículo. El día que partió —pandemia mediante—, con él despareció una mesa autografiada por Minujín. Las ventajas de recibir y partir sin inventario.
9) Marta Minujín
(firma que vale algunos euros)
Y, es que la firma de Marta, vale unos euros. ¿A cuanto cotiza la mesa que firmo en el Museo Mar? Una serigrafía en Mercado Libre esta a 79 mil pesos. Una mesa preservada debajo de costoso vidrio templado, debe ser de valor. ¿Debe ser?
10) Franco Bagnato
(¿próximamente concejal?)
Franco ya cumple un ciclo en el Senado. Las encuestas de imagen le siguen dando bien. Se habla de él para concejal de la ciudad. Interrogante: ¿se bancará la jugada?