1) Fabián Uriel Fernández Garello
(#yoavise)
Es un caso establecido: si confiás en el fiscal general, te merecés que te pase lo que te va a pasar, que es sentirte defraudado. Luego de veinte días, declinó la competencia de la causa por el aprovechamiento de la necesidad de los pauperizados que hace Nara Salomón. De manual.
2) Lali Esposito
(a hacerse cargo)
En lugar de hacerse cargo de su sevicia, se las da de contestataria. Una bandera para el aprovechamiento kuka de los fondos públicos. Cero humildad.
3) Santiago Eyherabide
(¿y este?)
Fiscal federal del semillero kuka de híper bajo perfil. Hace bardo buscando excusas fuera de todo sentido pretendiendo detener tanto la exploración como la explotación petrolera offshore. Durante años pagaremos el manejo apropiador del sistema judicial de los discípulos de Gramsci.
4) Sofía Pomponio
(decepcionada)
Inició fuerte: buscó, obtuvo y recogió pruebas de los usos de los planes sociales para hacer caja no por la política, sino por parte de un curro familiar disfrazado de política. Se llevó una decepción. Si confiás en Garello, así te va.
5) Nara Salomón
(ahora en la picota)
Protegida. Le dieron veinte días para que pueda ocultar y destruir pruebas. Beneficios de pertenecer a las tribus del PJ que tanto protege el fiscal general.
6) Florencio Aldrey Iglesias
(cobrando el 30 percento)
El brigantino emprendedor no sólo se hizo hacer una fellatio en público por parte de toda —decimos toda— la dirigencia política de la ciudad, sino que, además, facturó el 30% de lo recaudado para su «Ladrey Fest». Así es: como se autopercibió organizador, se cobró el 30% para él. Y la gilada haciendo cola para ponerla.
7) Juan Grabois
(siempre es por plata)
Hay un video que lo muestra muy crudamente: en una reunión de orgas, el titular del dicasterio papal dice a boca de jarro que «cuando hacemos quilombo, es por la guita». Y vaya si se apropió de la guita: un fideicomiso de seis mil millones por año. Tomá pa’ vo’.
8) Diego Rivera
(nadie va a investigar)
Se autopercibe líder de los vendedores ambulantes. En criollo: un capanga que vive de los pobres, a los que les da un diezmo por vender diversas mercaderías en negro. Su patético reinado se extiende por el complejo de Mogotes, en donde todo ocurre sin inquietar a nadie.
9) Jorge Pérez
(en modo «sucesor»)
Suele decirse de él que «es un negrito, lo confunden con el chofer de sí mismo». Debajo de esa piel de camuflaje, se oculta un gran depredador de fondos públicos y negocios oscurísimos. Dará que hablar.
10) Verónica Martin
(de salida)
La peor directora del HIGA en años, y miren que han pasado personajes negativos por allí. Se va. Ya le comunicaron la fecha de cese. Una buena noticia para quienes padecen en ese hospital público.