Jorge Bergoglio: una inmensa decepción
Quizá no lo sea para una parte importante de la grey católica. No es ese el propósito de estas líneas, no es lo sacro, es lo humano, puesto en la palabra de quien ocupa el trono de San Pedro y, según sostiene la liturgia, habla por él, expresando la palabra de Dios. Esa, es la cuestión de la fe. La decepción, es por la acción del hombre que, como jefe de un Estado afecta ignorar los hechos y habla por una facción criminal.