“Belmonte declaró que había un poder político que mandaba y él era el funcionario colocado”

Así lo indicó en la 99.9 el abogado Sergio Sosa Ortega, defensor de Juan Carlos Belmonte en la causa por las licencias truchas. Se refirió a un video donde estarían sacando la licencia sobrinas de Pulti y además, aportó datos sobre licencias ilegales que habrían sacado Marcelo Artime y Martín Aiello.

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La causa por las licencias truchas en Mar del Plata sigue sumando aristas muy precisas y que se desprenden de las propias declaraciones testimoniales. Una de las más importantes se dio el pasado lunes cuando, por una causa de una licencia puntual, brindó su testimonio Juan Carlos Belmonte, apuntado como el responsable del negocio.
Su abogado, el Dr. Sergio Sosa Ortega habló en la 99.9 sobre las palabras que ahora figuran oficialmente en la causa y señaló que “Belmonte amplió sobre otras situaciones de la causa principal con la cuál está imputado. Señaló que la expedición de carnets no es un tema exclusivo de Belmonte, sino que, como él mismo lo definió, era el boludo de turno. Reconoce el grado de responsabilidad que tenía pero no era jefe, ni manejaba nada. Indicó que había un poder político que mandaba y él era el funcionario colocado”.
Para comprender como funcionaba esa trama, hay un factor fundamental y es que varias personas contaban con la clave personal de Belmonte para realizar el trámite. “Habló también sobre las claves que deberían ser personales, pero todo el mundo tenía las suyas tanto para el inicio como para el cierre del trámite. Esto consta en el expediente desde el mes de marzo. Pedimos que se investigue y la fiscalía negó esa posibilidad. Incluso indicó que pidió cambiarla, Iglesias le hace el trámite en La Plata, le dió la nueva clave pero también la tenían todos. Desde cualquier terminal de internet se permitía el acceso con esa clave para hacer el trámite completo”, agregó el letrado.
Dentro de las distintas aristas que tiene el tema y la gran cantidad de licencias apócrifas que se entregaron, Sosa Ortega indicó que “hace unos 15 días atrás los señores Rubilar y Belmonte presentaron un escrito con la copia del video donde se ve a dos señoritas y una mujer que tramitan una licencia. En ese momento, Rubilar indicó que eran las sobrinas del intendente. No me consta pero por lo que sabemos serían familiares porque se indica en el video. Ahora el ministerio público debe investigar de quienes se trata”, aclaró.
Pero no es todo. También hay dos altos funcionarios del gobierno actual y personas cercanas al intendente Gustavo Pulti que tramitaron sus propias licencias por este sistema y además, con más irregularidades que las habituales. “Hay otra causa donde intervengo como letrado denunciante donde se nos informó mediante un anómino que los Sres Marcelo Artime y Martín Aiello se les había expedido licencias de conducir con trámites irregulares y falseando datos en enero y marzo de 2012”, dijo inicialmente el abogado.
Luego brindó la explicación pertinente: “en 2011 se cambió el sistema del carnet amarillo al plástico provincial y luego al nacional que es el vigente. Hubo un tiempo intermedio donde convivieron ambos sistemas. En noviembre de 2011 se expide, de acuerdo a la Dirección Provincial de Licencias de Conducir, la última licencia a un ciudadano común”. A pesar de ello, fuera de los términos establecidos se siguió sacando la famosa licencia amarilla: “el 3 de enero de 2012 se expide la licencia amarilla de Artime y eso estaba ya prohibido por ley. De la pantalla que está capturada por la fiscalía donde figuran las especificaciones de las categorías de conducir, está en blanco, no sabemos para qué vehículos está prohibido y para cuáles está habilitado. Siete meses después, el Sr tramitó una segunda licencia como duplicado con la licencia nacional en el ACA, pero hay que verificarlo porque el duplicado se da por pérdida o hurto”, especificó.
Ahora, toda esta información queda en manos del ministerio público para la investigación y esclarecimiento de lo sucedido. Los elementos están sobre la mesa y apuntan directamente por encima de Belmonte, aunque se insista en negarlo.