El Curiosity encontró rastros de materia orgánica en Marte

El robot explorador hizo un descubrimiento notable: al calentar en su horno muestras de rocas a 820°C, sus instrumentos identificaron vapores denominados aromáticos, alifáticos y tiofénicos.

Curiosity, el robot explorador del tamaño de un auto que recorrió cuidadosamente casi 20 kilómetros desde que hace seis años aterrizó en el cráter Gale, de Marte, hizo un descubrimiento notable para los astrobiólogos: detectó gran cantidad de moléculas orgánicas.
Al calentar en su horno muestras de rocas a 820°C, sus instrumentos identificaron vapores denominados aromáticos, alifáticos y tiofénicos, que pueden ser productos de descomposición de moléculas orgánicas atrapadas en el suelo marciano hace 3500 millones de años.
El Curiosity también detectó nueva evidencia de ciclos de metano en la atmósfera marciana que acompañan las estaciones.
Se anunció ayer en dos trabajos publicados en Science. Aunque estos datos no son prueba en sí mismos de la existencia de vida, son un signo alentador para futuras misiones de exploración.
El hallazgo es la prueba más sólida con que se cuenta de que los lagos marcianos alguna vez fueron una sopa de compuestos orgánicos. Pero todavía no se puede saber cómo se formó este material, si son restos de organismos del pasado remoto, producto de reacciones químicas o si llegaron a bordo de cometas.
Las moléculas orgánicas contienen carbono e hidrógeno, y también pueden incluir oxígeno, nitrógeno y otros elementos. “Marte nos dice que mantengamos el curso y sigamos buscando pruebas de vida -dijo durante una presentación Thomas Zurbuchen, director científico asociado de la NASA-. Confío en que nuestras misiones actuales y futuras harán descubrimientos aún más impresionantes en el planeta rojo”.
“El Curiosity no determinó la fuente de las moléculas orgánicas -agregó Jen Eigenbrode, del Goddard Space Flight Center en Greenbelt, Maryland, autora principal de uno de los trabajos-. Ya sea que hayamos dado con rastros de vida antigua, que esta materia haya sido alimento de bacterias o que haya existido en ausencia de vida, contiene pistas químicas sobre las condiciones y los procesos planetarios”. El metano también pudo haber sido generado por reacciones entre el agua y las rocas, aunque no se pueden descartar orígenes biológicos.
No es la primera vez que el robot de la NASA encuentra moléculas orgánicas. En 2015, los científicos reportaron que habían dado con rastros de cloro en las rocas del planeta, pero sospechas de contaminación o fallas del equipo hicieron que el mundo científico les restara credibilidad.