La presidente del Centro de Jubilados “Tercera Primavera”, Norma Monteagudo, habló esta mañana en la 99.9 sobre el aumento de 11,7% que le otorgó el Gobierno a los jubilados. Señaló que “el haber mínimo es muy bajo y estamos casi por debajo de la línea de pobreza”.
Con gran repercusión a nivel nacional, se anunciaron aumentos para los jubilados de todo el país a comienzos del presente año. Pero los incrementos están muy lejos de equiparar la ganancia para los ancianos, ya que el mínimo sigue quedando muy por debajo de lo indispensable.
Así lo expresó esta mañana en la 99.9, Norma Monteagudo, presidente del Centro de Jubilados “Tercera Primavera” de Mar del Plata. “Reconocemos que se ha hecho mucho por los jubilados, pero todo eso es poco para nosotros. El haber mínimo es muy bajo y estamos casi por debajo de la línea de pobreza. Un gobierno que se jacta de la repartición de la riqueza y la equidad, a nosotros no están discriminando”, afirmó.
Todas las jubilaciones terminan siendo más altas que la mínima que se cobra actualmente: “se han fijado para Montoneros jubilaciones por 6.000 pesos, a los presos les están pagando 4.000 pesos, y el sueldo mínimo, vital y móvil supera los 3.400 pesos. No hay manera de que un jubilado viva con 2.400 pesos”.
El defensor de la Tercera Edad, Eugenio Semino, había reclamado por un plus, pero parece que tampoco será otorgado: “esperábamos que se agregara un plus de 900 pesos para cobrar el mínimo del salario digno. Queremos vivir con la dignidad que corresponde para aquellos que dieron años de su vida. Nos parece irrisorio, es una burla”.
La cifra oficial llega a casi un 12% de aumento, números que con la constante y creciente inflación en el país parecen insuficientes. “Nos dan un 11,7% desde marzo y sabemos que la inflación ya se lo comió. Con estas cifras tenemos que durar hasta septiembre de este año, con un cálculo de inflación que supera el 4% mensual”, explicó Monteagudo.
Además, destacó que la mayoría de los jubilados no cuenta con los remedios gratuitos, como se dice desde el Gobierno, y explicó por qué: “el adulto mayor necesita una dieta equilibrada y una medicación. Ese cuento de que la medicación es gratis por PAMI es mentira, porque solo el 42% de los jubilados tienen PAMI y el resto tiene otra obra social. La situación es desesperante”.
El reclamo tiene que ver con el respeto y con no permitir que los ancianos vivan en la pobreza: “la medicación ya no nos aumenta por mes, nos aumenta por semana. Queremos un trato igualitario con el resto de la ciudadanía, que se den cuenta de que existimos, somos una masa de más 6 millones que queremos que se nos respete como personas”.