El productor y emprendedor relató en la 99.9 el episodio que vivió en la rotonda del Golf donde estaba con su madre tomando un poco de aire después de 90 días de encierro: “Se le faltó el respeto a una persona mayor como mi mamá”.
El control que hay en Mar del Plata sobre alguna persona que quiera ir unos segundos a mirar el mar, es alarmante. Paralelamente hay un descontrol absoluto en otros sectores.
El reconocido productor y emprendedor Gaby Menta, tuvo una desagradable situación en la costa de la ciudad con su madre de 84 años: “asumí primero el error de que paré un segundo en la rotonda del golf donde mi mamá habitualmente va. Con la manía de los pájaros, lleva su bolsita con miguitas y se entretiene de esa forma. Mi mamá lleva entre 90 o 100 días en su casa porque no quería salir”, dijo a través de la 99.9.
A pesar de que le insistió varias veces, su madre recién el martes pasado decidió dar una vuelta en auto para salir de la casa: “me dijo que quería subirse al auto para dar una vuelta. Me bajé para hacer 4 o 5 fotos para un cliente y cuando volví mi mamá había bajado y se sentó un segundo en el banquito que estaba al lado del auto”.
Ahí fue donde comenzó el problema por una televisiva aparición en ese lugar: “cuando se está levantando, le abro la puerta y me cruzan un auto. Tuve 10 segundos de terror por mi vieja, llegué a pensar que me robaban todo, me pareció patético que me crucen el auto. Había 4 personas de civil que se bajaron, sin ninguna insignia policial inicialmente”, relató.
La escena no terminó allí ni mucho menos porque siguieron apareciendo efectivos. “Uno se presentó como Policía Federal y de la nada aparecieron dos tremendas motos con policías. Ahí relajé y supe que eran policías. Me pidieron el documento mío y el de mi madre y podría haber entrado el juego de no darselos, pero asumí el error de haberla sacado a mi mamá a tomar aire”. No hubo sanción, sino sólo un apercibimiento: “me dijeron que iban a hacer un apercibimiento, pero se bajaron como en las películas de Estados Unidos. Uno se alejó con un handy y me quiso chicanear. Se le faltó el respeto a una persona mayor como mi mamá”.
Para Menta hubo varios aspectos de toda esa puesta en escena que estaban fuera de lugar, pero todavía no habían terminado: “me hicieron firmar algo y no me quedó una copia de nada, me hizo poner de espaldas y me dijo que tenía que me tenía que sacar una foto. Patético”, finalizó.