Malas lenguas 1230

Café para dos. Fue así: a la vista de quien fuera que estuviera o pasara por allí. En el café El Cóndor de Güemes se reunieron, café de por medio, el intendente Guillermo Montenegro y el diputado nacional y presidente del poderoso comité provincial, Maxi Abad. Los dos tienen el sabot y son quienes van a repartir las cartas en el armado de las listas, desde consejeros escolares hasta la legislatura provincial. Oídos atentos en mesas próximas no lograron decodificar mayores intercambios que permitan dar datos firmes. Eso sí: de la charla quedó claro que los cambios en el gabinete serán en junio, luego del cierre de listas. Hay tanto nervio…

Mala racha. La que atraviesa Luis Solimeno. La caída del marinero Luis Ríos de 59 años de uno de los buques de su flota, el Ur Etza, implica un dolor por la pérdida de una vida y un auténtico rompedero de cabeza por las acciones legales. Por si fuera poco, fue asaltado en la vía publica por moto chorros quienes lo arrastraron, por lo que se golpeó y se quebró la cadera. Muy dolorido por la situación del marinero fallecido cuyo cuerpo fue hallado en Playa Grande, Luis suma este momento que es una pandemia sin remedio hasta hoy: la del crimen que esta desbordado.

Cuando un amigo se va. Que el virus existe es un hecho. Que se lleva vidas también, aunque haya mucho para discutir. Los números llegan casi a los 60 mil. Lejos de la cosificación de la estadística, cuando esa vida que se va es conocida, llena de congoja. Dicho esto: ha fallecido Enrique Godoy, más conocido por su irónico apodo de “chiquito”. Un gran tipo.

De reclamos y ficción. Un reclamo que pretendía ser multitudinario y sólo fue una movida de organizaciones piqueteras se llevó a cabo frente a la seccional cuarta. Todo fue por un joven detenido en circunstancias debatibles. El joven en cuestión, según su relató, intentó interceder entre policías y un repartidor de delivery y terminó a los golpes de puño con los uniformados. De allí, siempre según su relato, lo condujeron detenido a la seccional cuarta y allí, supuestamente, “los policías, ya en la comisaria cuarta, le pusieron la marcha militar y le dijeron que estaban esperando que vuelvan los militares para ‘hacerlo mierda’”. Faltaba el mapuche con los binoculares y el hermano Sergio. El grupo está integrado por pequeños grupúsculos que se esconden detrás del símbolo tristemente marchito de la domestica Teresa Rodríguez, muerta por una bala perdida en Cutral Co en abril de 1997. Una constante de la izquierda: usar la memoria de la gente para sus fines.