El secretario general de la Asociación de Capitanes y Patrones de Pesca, Jorge Frías, indicó que a pesar de la reunión con Gustavo Pulti, no se han logrado avances para resolver la situación del puerto de Mar del Plata. “Cada vez que un barco llega, no tiene apuro de salir, y cada empresa regula su producción”, subrayó en la 99.9.
El sector portuario marplatense sigue esperando respuestas desde el ámbito político, para no sufrir un invierno igual o peor al del año pasado. Sin embargo, a pesar de las reuniones con el Intendente, la solución sigue siendo lejana.
Esta mañana en la 99.9, el secretario general de la Asociación de Capitanes y Patrones de Pesca, Jorge Frías, indicó: “venimos teniendo reuniones entre los gremios de la actividad, e incluso con el sector empresario. Hemos tenido dos reuniones con el intendente Gustavo Pulti porque la cuestión nos obliga, ya que la flota está detenida por encima del 70%. Esto se refleja de manera alternativa”.
Momentáneamente, estos números mejoran porque por estos meses algunas especies atraviesan su momento más productivo: “actividades como la pesca de calamar, nos permite llevar el presente del arrastre porque se inician las capturas en esta fecha y está la flota trabajando a pleno. Está a un 100% en esta actividad. El recurso está respondiendo, la talla de captura no es la esperada, pero sí el tamaño comercial. Esto va creciendo. A medida que pasan los días, el calamar se desarrolla rápidamente y marea tras marea mejora el nivel de captura”.
Los trabajadores tienen sus problemas, pero también el sector empresarial está mediando para que alguien se haga responsable de la situación que atraviesa nuestro puerto. Frías señaló que “desde el sector empresario el problema ya no es el mercado precisamente, ni siquiera el combustible por el cual bregan durante todo el año. Parte del este sector tiene una quita en el costo por lo que consume. Hay otros sectores que no tienen esa quita porque consumen menos”.
Si a todo esto se suma un mercado internacional que opera en baja y demanda menos exportaciones, el panorama se torna muy difícil: “el factor de consumo es una realidad que se desarrolló a lo largo del año. Los principales consumidores, como Europa, tienen sus dificultades y eso hace que el consumo no sea el deseado y se complica colocar el producto. La paridad cambiaria los está afectando fuertemente. Hacen una logística de acuerdo a sus posibilidades, regulando sus capturas y manteniendo el pescado congelado, esperando una señal para comenzar a comercializar”. Luego precisó: “el puerto, hoy, tiene una imagen que nos lleva a pensar al día 1 de enero de cada año; algo que normalmente no debería ser así. Cada vez que un barco llega, no tiene apuro de salir, y cada empresa regula su producción”.
Aunque ya se debería estar pensando en las paritarias, la tarea es imposible en el contexto que se vive: “hoy, con la flota paralizada y los barcos amarrados, ni sentido tiene ponerse a discutir porcentajes salariales”.
Más allá de las reuniones constantes, poco podrá hacer el máximo mandatario local para encontrar la solución: “el Intendente es un actor político indiscutible en la ciudad, tiene la posibilidad de contactarnos con actores de mayor poder. Esto es atendido por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, pero es evidente que las soluciones no llegan. Más que una conexión con el Gobernador o la Presidenta, no puede hacer el Intendente”.