La investigadora y docente se refirió en la 99.9 al impacto en los medios del crimen de Fernando Báez y como se ha transformado casi en una novela de la cuál se habla todo el día: “se termina ficcionalizando lo que suede”.
El impacto mediático que ha tenido el crimen el Fernando Báez lleva a un replanteo de cómo los canales televisivos están todo el día hablando del tema y girando en torno a los mismos puntos como si fuera el único eje de comunicación posible.
La investigadora y docente, Nadia Koziner dio su punto de vista a través de la 99.9: “hay una retroalimentación entre los medios de comunicación, no es que la preocupación nace en los medios. El caso tiene muchos componentes que causan indignación, pero favorecen ese tratamiento 24×24”, señaló.
La cantidad de material audiovisual es un hecho central en el caso ya sea con videos como con audios que también generan un tratamiento distinto: “uno de los temas centrales es que desde el minuto uno se pueden identificar a los victimarios que dejaron huellas en sus propios celulares chateando en vivo mientras hacían el asesinato, tenemos imágenes de todas las cámaras de la zona que usan los medios. Eso lo vuelve relevante en términos televisivos y a partir de ahí, las redes sociales también”.
En cuanto a los condimentos destacados del caso de Fernando Báez, también puntualizó a la violencia como punto detonante: “hay un nivel de violencia que causa horror e indignación. Estamos acostumbrados a ver peleas a la salida de los boliches, pero el nivel de violencia registrado en este caso, genera indignación y es inaudito”. De a poco se han ido reproduciendo nuevas pruebas que aportan a un circuito de comunicación: “contar con imágenes tiene un efecto de verdad indiscutible. Todos los días tenemos algo nuevo para aportar del caso con una prueba audiovisual y es un condimento central que aporta a la relevancia del caso”.
Como ha pasado en distintos casos cotidianos, tampoco le parece correcto a Koziner que se empiece a contar como si fuera una novela, algo que en los medios también es constante: “en muchos casos se termina ficcionalizando lo que sucede, porque se tratan de agregar nuevos capítulos a la misma historia”, finalizó.