“Ojalá Galeano termine con una condena que deba cumplir en un calabozo”

El ex policía y actual abogado penalista Juan José Ribelli se refirió en la 99.9 al comienzo del juicio contra el juez Galeano y otros actores judiciales por haber pagado coimas en 1996 con el objetivo de incriminarlos en el atentado a la AMIA. Por ese hecho, varios policías estuvieron 8 años presos injustamente: “apenas salí en libertad, lo primero que dije era que no iba a descansar un día hasta no verlo a Galeano primero destituido y luego preso”, recordó.
Juan-José-Ribelli

La causa AMIA ha comenzado en la justicia un nuevo capítulo de su complicada trama. El juicio los responsables del complot que dejó en la cárcel durante 8 años a muchos policías que nada tenían que ver con el atentado, ha comenzado.
Uno de los querellantes que estuvo penando el encierro injusto durante ese tiempo, pero hoy es abogado penalista y está en el banquillo de enfrente, Juan José Ribelli habló en la 99.9: “después de muchos años, logramos por fin llegar a este juicio tan ansiado. Lo más fuerte ayer fue ver en el banquillo que ocupara otrora como acusado yo, verlo sentado al juez, a los fiscales y nosotros en el lado de la querella”, dijo.
El gran objetivo que persiguen es ver al juez Galeano preso y el camino parece ser el indicado: “la trama principal de este juicio es el pago ilegal de 400.000 dólares en el año 1996 a Telleldín por parte del juez Galeano con fondos del estado argentino que proveyó Anzorregui. Todo esto se inscribió en el marco de la pelea política de Menem y Duhalde para empañar la campaña política de éste último. Por eso nos mandaron 8 años a la cárcel injustamente”, sintetizó. También recordó que en ese momento “Duhalde como gobernador decía que tenía la mejor policía del mundo y estaba preparando su campaña presidencial y por eso comenzó esa interna política para empañar las posibles candidaturas”.
El manejo del magistrado a cargo de la causa fue muy grande y evidente. Hoy, años después están en el camino de comprobarlo por el daño que le han causado a muchos policías y sus familias. Ribelli recordó que “Galeano en vez de comportarse como un juez idóneo, armó una gran base de datos con todas las circunstancias posibles que rodeaban a Telleldín y otras personas. Como conclusión dejó dos puntos ciertos. Uno era que meses antes del atentado había estado detenido circunstancialmente en una brigada de Lanús donde trabajaba yo y otro tiempo antes del atentado había sido perseguido por otra brigada de Vicente López. Eso lo transformó en una novela falsa pagándole los 400.000 dólares y obligándolo a decir que en esa ocasión que estuvo detenido, pagó una coima con la Traffic y nos convirtió en los partícipes necesarios del atentado a la AMIA”.
Después de vivir semejante injusticia, se puso un objetivo claro que ahora está cada vez más cerca de cumplir. “Apenas salí en libertad, lo primero que dije era que no iba a descansar un día hasta no verlo a Galeano primero destituido y luego preso. Dios quiera que cuando termine el juicio tenga una condena que deba que pagar en un calabozo como el que ocupamos nosotros”, finalizó.