Pablo Simoni: “Encontramos un EMVIAL no operativo y hoy la situación es otra”

El Ingeniero habló en la 99.9 luego de la presentación de nueva maquinaria vial que se realizó ayer: “fue una tarea ardua poner en funcionamiento las máquinas”, explicó.

El EMVIAL y la Municipalidad de General Pueyrredón presentaron en las últimas horas nueva maquinaria vial que fue adquirida para los diversos trabajos en la ciudad y otras tantas que fueron recuperadas ante una gestión de Gustavo Pulti que dejó el área sin herramientas.

Así lo indicó el titular del ente, el Ingeniero Pablo Simoni en la 99.9: “encontramos un ente no operativo, con muchas falencias en las herramientas para realizar los trabajos en las calles de hormigón y granza. Fue una tarea ardua poner en funcionamiento las máquinas. Ayer mostramos una retroexcavadora que nos costó mucho dinero repararla y recién pudimos terminarla ahora y también una motoniveladora con pocas horas de uso que estuvo prácticamente 10 años en desuso”.

Se ha trabajado mucho para recuperar la operatividad teniendo en cuenta que la situación era tan grave que ni siquiera había donde conseguir los repuestos: “la realidad hoy por suerte es otra, tenemos un municipio organizado que saneó las cuentas con sus proveedores. Nosotros no podíamos pedir una manguera hidráulica a ninguna de las casas especializadas. Tuvimos que firmar un convenio con un astillero de Mar del Plata a modo de donación para reparar maquinarias”, ejemplificó.

Los pocos trabajos que se hicieron en los últimos años de administración antes del actual gobierno cuando el ente, por ejemplo, estaba conducido por Santiago Bonifatti, fueron mal desarrollados y por eso tenían una duración menor: “la tierra negra no es compactable, se va degradando día a día y tenes un descalzamiento de loza en primera medida. La situación de Peralta Ramos fue visible ante los medios, pero hemos saneado otras que por la erogación económica y porque no afectaba a tantos vecinos no había sido tenido en cuenta”, indicó sobre algunas obras en particular.

El nivel de desidia era tal que los vecinos pagaron por obras que jamás comenzaron: “hicimos 78 calles de obras que estaban pagas y nunca fueron ejecutadas. Eso lo hicimos con dinero de la provincia cuando los vecinos habían hecho pagos en 2014”, finalizó.