“Pulti es un pésimo administrador”

Después visitar la sala sanitaria del Barrio Don Emilio y hablar con los vecinos, el concejal Carlos Fernando Arroyo criticó las decisiones del intendente Gustavo Pulti, ya que ése lugar fue construido y aún no se inauguró a pesar de las necesidades de los vecinos. “Creo que esto es una des-administración total”, indicó en la 99.9.

Ni siquiera un año electoral como el que estamos transitando hace que las cosas tomen un mejor rumbo en la ciudad. En medio de los constantes y desacertados anuncios sobre el funcionamiento del CEMA, se han desabastecido absolutamente las salitas del Partido de General Pueyrredón.
Ayer, el concejal del Bloque Atlántico, Carlos Fernando Arroyo, se reunió con los vecinos del Barrio Don Emilio, donde hay una unidad sanitaria abandonada y sin inaugurar, a pesar de las urgencias de la zona. Esta mañana en la 99.9, el edil afirmó: “lo que hacen con la Salud es un relato que no resuelve la situación real. En el Barrio Don Emilio vimos cómo una unidad sanitaria que está terminada hace tiempo, no se utiliza. Está arruinándose; el pasto está muy crecido, los vidrios rotos y una población importante que necesitan los servicios de un pediatra y un clínico”.
En estas circunstancias, los vecinos no encuentran respuesta cuando tienen alguna emergencia, por lo que deben dirigirse a otra sala dentro de barrios muy inseguros. “Es posible que el Gobierno crea que se soluciona yendo al barrio de al lado, pero no es así, porque hay 15 cuadras de distancia y no es lo mismo que caminar por el centro. Entré con el auto y tuve miedo porque hay autos incendiados por todos lados, suciedad y demás. Uno no tiene en claro si eso es Mar del Plata”, indicó Arroyó. Luego sentenció: “hay dos Mar del Plata: una que va por la costa y otra que está en los barrios”.
Como siempre, el gobierno de Gustavo Pulti vive de promesas, y eso fue lo lo único que recibieron los vecinos de Don Emilio: “alguien les dijo a los vecinos que se habilitaría la sala el 10 de febrero con el corte de cinta de la Fundación de Mar del Plata. Pero las mujeres y las criaturas necesitan los servicios médicos, no hay que esperar ningún aniversario. Para mí, esto es política barata”, afirmó el concejal.
En esa división de la ciudad, la “otra Mar del Plata” tampoco está funcionando muy bien. Muestra de ello es la temporada que se está atravesando: “el turista no es bien atendido tampoco por el resultado de la temporada. Podemos decir que es un fracaso, eso es evidente. Hay menos gente y se gasta menos. Parece que es un deporte ver quién echa al turista; en vez de atraerlo, lo sacamos”. Después abundó: “los precios son una locura. No puede ser que en cierto lugar un kilo de helado salga el doble que en el otro. Hay una especulación equivocada en torno al turista, y se cree que explotándolo se puede mejorar. Es un error muy grave”.
Otro tema delicado tiene que ver con el servicio de trenes, que esta temporada tuvo muchas demoras y llegó a suspender viajes por las malas condiciones en las que se encuentra. En ese sentido, Arroyo recordó: “personalmente, estuve en la recepción del Expreso Marplatense cuando llegaron Perón y los artistas en el año ’54 o ’55, cuando empezó el Festival de Cine. En ese tiempo llegaban más o menos 8 a 10 servicios de trenes. Con los años me tocó ordenar la Estación, cuando llegaban en la madrugada los trenes; era un mundo de gente a las 5 de la mañana. Hoy en día el tren es la muerte total, es un chiste y me llama la atención que la gente siga viajando cuando ve que están 4 horas parados o tardan 12 horas en llegar. Yo no viajaría ni loco, prefiero ir en bicicleta”.
No hay dinero para nada en la ciudad, simplemente como consecuencia de una mala utilización de los recursos: “si tanto dicen que no tienen deuda, que le paguen a la gente, así tenemos servicios. Creo que esto es una des-administración total y el Intendente en particular, es un pésimo administrador”.
Por todo esto, Arroyo convocó a la conciencia de los marplatenses, que se enfrentarán este año con las urnas para cambiar el Concejo Deliberante, o la “escribanía”, como él la define. “La población de Mar del Plata debe analizar a quién vota y por qué para defender sus propios intereses. Los marplatenses somos muy tranquilos”, agregó.