Malas lenguas 1166

 

La marcha del cangrejo I. En nuevo ejemplo de retroceder en tanto se cree que se avanza, la municipalidad habilitó reponer los carteles en el Paseo Cultural Estación Terminal Sur bajo el nombre de fantasía de “Paseo Aldrey”. El hecho en sí no genera conmoción visible, pero es la comidilla de los sectores políticos que se preguntan cuándo irá el intendente Montenegro a elogiar las instalaciones del diario del brigantino coruñés al estilo de la ex gobernadora Vidal. Una dimensión del deterioro de la prensa impresa es el elevado número de kioscos de diarios que  se están quitando de las veredas de la ciudad. Retroceder no es avanzar, y va  a tener su precio en términos políticos.

La marcha del cangrejo II. El estado de deterioro de los kioscos abandonados habla más de la caída de la venta de información en soporte papel que cualquier otra cuestión que pueda señalarse. Decía al respecto el titular de Defensa civil Rodrigo Goncalvez: “el año pasado hicimos un operativo y el viernes hicimos otros para continuar con las tareas de remoción. Encaramos cuatro: Bolivar y Santa Fe, Moreno y Buenos Aires, y la idea era también el de Independencia y Paso y Luro y Entre Ríos, pero no se pudo. En el último había tres autos estacionados, a pesar de que lo habíamos perimetrado; mientras que el de Independencia no se pudo por cuestiones administrativas y judiciales. La idea es avanzar porque algunos traen problemas de inseguridad y situaciones delictivas”. Fuera del protocolo municipal, vecinos de Libertad al 4500 sacaron un kiosco ubicado en mitad de dicha cuadra literalmente a golpes de maza. Otros kioscos están en la lista, y hablan del fin de una era.

Ascenso y expulsión. Sin piedad y con un relato nac y pop las actuales autoridades del ANSES echaron a 130 personas que desempeñaban tareas dirigenciales en las UDAI de todo el país. En tanto Pablo Obeid, esposo de Fernada Montoto Raverta, queda al frente del ANSES, funcionarios locales fueron desplazados en esa lista que expone la persecución política que se da en todo el país. Un audio que circula en las redes señala: “Hay un fallo, Baracat, es una sentencia de tribunales de Santiago del Estero contra Anses por una desvinculación que databa de 2017”. El mensaje se difunde porque los expulsados están articulando una contraofensiva judicial, dejando en claro que las decisiones son políticas y van por la revancha en contra de quienes, en los últimos cuatro años, dieron la cara (y a veces la salud) para dar batalla a la corrupción en este ente del estado nacional.

Ascenso y sorpresa. Los registros automotores fueron creados en los ‘90 por el gobierno de Carlos Saúl Menem. Los titulares de los mismos no llegaron ni por sorteo ni por licitación: fueron acuerdos o prebendas políticas lo que determinó la titularidad de los mismos. Pasados los años, algunos fueron intervenidos. Vale recordar, por ejemplo, que luego de un allanamiento, se dio lugar a la intervención del registro del que era titular José Luis Ventimiglia, quien actuó como juez federal en el caso María Soledad Morales. Lejos de aquellas épocas, hoy los acuerdos familiares siguen: Nicolás Paratto, hijo del inolvidable Domingo, el alma matter del Torreón del Monje, se hará cargo del registro del automotor 12 de Mar del Plata. ¿El motivo? El actual titular presenta su renuncia por acceder su esposa a un alto cargo en la Dirección Nacional del Registro Automotor, y el hombre que obtuvo el cargo en concurso sin oposición hace un gesto ético y se aparta. Nico Paratto, buen chico, goza obvio del apoyo y capacidad de rosca de su mamita, titular de otro registro: la abogada María del Carmen Sarlo, íntima amiga de la ascendida esposa del renunciante.