Malas lenguas 1358

Complicados los prefectos I. La postura de la Prefectura Nacional de llevar a cabo una política de «aguas sucias» a nivel de la flota pesquera está en un limbo por la falta de criterios claros por parte de los actuales jerarcas de dicha institución naval. Tanto es así, que luego de una reunión en el edificio Guardacostas, lo único que imperó, fue el desconcierto. Los prefectos presentes —de la más alta jerarquía— parecen ignorar —cuando menos, esa es la impresión que se llevaron quienes asistieron a la reunión— qué es lo que se requiere para poder avanzar en el tema en cuestión. Léase: que el orín y los excrementos de las tripulaciones no sean descargados en el océano Atlántico.

Complicados los prefectos II. De la reunión lo único que quedó claro es que ni idea tienen de qué implicaría hacer el trabajo que solicitan: para hacer un baño con el sistema que piden, habría que modificar toda la estructura de los buques, cambiar el plano de obra, la instalación eléctrica y demás parámetros lo cual sólo puede hacerse en un astillero y, para hacerlo en grada, hay que pedir presupuesto, esperar turno para el ingreso al astillero en cuestión, y esperar luego el tiempo de la obra. Todo muy complejo. Pero, los prefectos tienen la lapicera y siguen parando barcos, así como así. Todo muy raro.

El calderista está furioso. El secretario general de la UTHGRA local está de punta con dos grupos de negocios a los que trata peor que si fueran negociantes de esclavos. Presume de su poder y envía, día tras día, inspectores del Ministerio de Trabajo de la provincia quienes, por lo visto, están a su entera disposición, con la única tarea de controlar estos comercios específicos. Hay ya un claro abuso de poder que incluye comunicados con agravios personales y amenazas. Así lo hizo con un negocio hotelero de la ciudad, y luego todos se cayó a pedazos tanto en el Ministerio como en la justicia. Debería recordar el viejo proverbio que dice: «ten cuidado a quién pisas al subir, te lo puedes encontrar al bajar».

Ciudad violenta. Los hechos de violencia en Mar del Plata están en un espiral ascendente que parece no tener fin. En estos nueve meses, se han perpetrado ya treinta y dos homicidios, y se notificaron treinta y seis heridos de bala. Hay de todo: violencia doméstica, cruces entre grupos por el control de la venta al menudeo de droga, lo que quieras. Lo que seguro no hay, es una política de seguridad: a mayo de este año, el robo de autos y camionetas creció un 73%, según informa el Centro Municipal de Análisis Estratégico del Delito, comparándolo con datos de abril del 2022. Chevrolet Corsa, VW Gol y Toyota Hilux fueron los autos y camionetas más sustraídos. Estadística hay. Es terrible y lamentable.

Insaurralde y Clareci. Un despliegue de glamour grasa y mal oliente. Un fallido inexplicable, o una estrategia para bajarle los decibeles al comentario establecido entre el PJ y los ámbitos políticos de que el elegido por Cristina Kirchner para darle volumen al gabinete de Kicillof, Martín Insaurralde, está metido en un tórrido romance con otro dirigente del mismo partido. Políticamente impresentable, pero socialmente, instala la idea de un putañero vicioso. Para ciertas mentes, es una imagen más potable que la de un político homosexual. Cada uno…