Malas lenguas 1025

De disparate y ausencia de sentido común. Dijo Shakespeare un día que hay más cosas entre el cielo y la tierra que las que el común de los mortales puede ver, y parece que es así, nomás. O por lo menos parece ser el caso de la insólita exculpación de la que el juez de garantías Juan Tapia echó mano para liberar a Eduardo Bruzetta