Entre copa y copa…
Seguramente, ésta debe ser una de las semanas más “comidas” en el mundo. Ya sea por la festividad navideña, vivida como si en todo el mundo fuese invierno; o por el cambio de calendario, la única manera de celebrar parece ser juntarse alrededor de una mesa y comerse todo. Los que pueden, claro. Porque mesas hay, y si no, se improvisan. No pasa lo mismo con la comida.