Implacable búsqueda de la verdad
Las escenas de horror no fueron provistas por la imagen televisiva: fueron plantadas por el discurso y los zócalos de la cobertura. Se habló del culto a San La Muerte, de convivencia con un mono y un perro, más un abandono cruel hasta reducir a una niña de 15 años a la condición extrema de apenas una bolsa de huesos analfabeta de no más de 20 kilos.