Malas lenguas 1262
Lucía, los jueces y Barbano I. Lucía Pérez murió ahogada en su propio vómito. Lucía Pérez fue «empalada» por una fiscal ignórate, María Isabel Sánchez, quien debería, cuando menos, haber sido echada de la fiscalía a la que aún concurre, percibiendo un suculento estipendio que le paga el Estado financiado por los impuestos regresivos que pagamos entre todos.