A los botes

Final de época, ya no hay espacio para la duda. Concluye un tiempo marcado por los extremos en materia de políticas públicas. De la mano de un “populismo trivial” -en palabras del politólogo José Nun-, Cristina Fernández entregará el gobierno con niveles de pobreza, inflación y reservas de igual o equivalente tamaño al que recibió Néstor Kirchner en 2003.